El descontento de un gran número de consumidores con el servicio que ofrecen las eléctricas tradicionales ha ayudado a la proliferación de nuevas comercializadoras. Una de ellas es Ecovatios, empresa de reciente creación, que ha conseguido en muy poco tiempo hacerse un hueco en el mercado. ¿Cuándo nace Ecovatios y cuál es el perfil de sus clientes? La empresa fue fundada a finales de 2014 porque detectamos claramente que había un hueco en el mercado por el elevado grado de insatisfacción de los clientes con el servicio eléctrico y, en 2016, empezamos a facturar. El año pasado facturamos 350.000 euros y este año acabaremos con 1,2 millones de euros. Para 2018 el objetivo es acercarnos a los 3 millones de euros. Actualmente tenemos unos 500 clientes de los que casi el 90 por ciento son empresas, con ahorros de un 14 por ciento de media al año. A finales de 2017 vamos a abrir nuestro foco a clientes particulares, con el objetivo de alcanzar los 5.000 a finales de 2018. Ecovatios ha sido pionera en una iniciativa para promover el autoconsumo con fotovoltaica. Efectivamente. En octubre de 2016 fuimos la primera eléctrica 100 por ciento renovable en poner en marcha una aplicación online, muy sencilla de manejar, que permite a los clientes, en tres minutos y utilizando tecnología de geolocalización, introducir los datos necesarios para evaluar el potencial de autoproducción energético de su cubierta. Los clientes reciben de Ecovatios, gratuitamente, una propuesta de proyecto, acompañada de una evaluación de su rentabilidad, en un plazo de 24 horas. Para la ejecución de los proyectos, contamos con una red de ingenierías e instaladores autorizados que garantizan la calidad de las instalaciones fotovoltaicas. ¿Cuál es la lógica detrás de su impulso al autoconsumo? Nuestra visión sobre este tema es sencilla: si eres un autoconsumidor, tanto en el caso de una empresa como de una familia, contribuyes de manera solidaria, ambiental y económicamente con tu país, porque estás haciendo una inversión, con su efecto dinamizador en la economía y, de paso, estás ayudando a España a conseguir sus objetivos medioambientales fijados internacionalmente. Por esta razón, creemos que la regulación debería favorecer este tipo de proyectos y a sus promotores, y no ponerles trabas. ¿Están ofreciendo baterías a sus clientes? Hemos desarrollado nuestro propio modelo de cálculo, tal y como hicimos con el autoconsumo sin baterías, pero en este caso se trata de un modelo algo más complejo. Al enfocar a partir de ahora nuestro negocio también al cliente particular, queremos sacar una oferta con baterías para este mercado. Estamos trabajando en ello y, lo único que puedo adelantar, es que será algo completamente innovador. ¿Tienen pensado hacer algo en generación? La generación nos interesa en una fase posterior de la empresa, pero antes, hemos querido llegar a la rentabilidad. Una vez alcanzado el equilibrio financiero, el siguiente paso va a ser ampliar nuestro foco para incluir a clientes particulares. Hay comercializadoras que, para crecer, han optado por la entrada de algún fondo de inversión, pero no es la única posibilidad. Una alternativa podría ser, por ejemplo, crear una alianza con una comercializadora de fuera que se quiera implantar en España o, incluso, llegar a un acuerdo con una empresa que no esté presente en el sector energético y quiera entrar en él y nos aporte sinergias interesantes.