La firma cuenta con filiales en EEUU, México y CanadáEl grupo francés Rouiller se ha hecho con el control exclusivo de Magnesitas Navarra (Magna), la primera minera de la región. La operación está sujeta, por el momento, a la aprobación por parte de las autoridades de competencia correspondientes. Hasta la fecha, el grupo galo ostentaba el 60 por ciento, mientras que la compañía griega Grecian Magnesite tenía el 40 por ciento restante, que entraron en el accionariado hace casi dos décadas. De esta forma, Rouiller refuerza su apuesta por la compañía española, en la que trabajan más de 240 personas. La operación ha sido articulada a través de Timab Magnesium, la participada de Rouiller dedicada a la producción y venta de fosfato magnésico, así como otros productos químicos como fertilizantes o alimentación animal. Fundada hace más de siete décadas, la compañía exporta más del 85 por ciento de su producción a 60 países y cuenta con filiales en Norteamérica, México y Canadá. En la actualidad, su cifra de negocio se sitúa en torno a los 70 millones de euros. Magnesitas cuenta con dos instalaciones, una en Navarra y otra en Soria. De hecho, hace una década que la compañía alertó de que los recursos de la mina navarra se estaban consumiendo, por lo que pidieron una ampliación, que les metería en un proceso judicial que ha durado todos estos años. En concreto, en el año 2007 solicitaron al Gobierno de Navarra ampliar la mina de Azcarate hasta la localidad de Zilbeti, situada en la Zona de Especial Conservación del Monte Alduide. El gobierno foral lo aprobó, dando comienzo al proceso judicial y a la batalla con las organizaciones ecologistas, que se ha resuelto con la anulación por parte del Tribunal Supremo de la autorización para desarrollar esta nueva instalación, al considerar que podría haber un "prejuicio irreversible" para la flora y fauna de la zona.