Lastra su cuentas hasta septiembre por la compra de los convertibles de ACS Los inversores suelen ser agradecidos con las empresas que revisan al alza las previsiones de sus principales magnitudes, y ayer no fue una excepción con MásMóvil. Tras mejorar sus objetivos, la bolsa premió el esfuerzo con un repunte del 7 por ciento en el valor, hasta los 75,96 euros. La compañía de telecomunicaciones confirmó ayer sus favorables expectativas para el conjunto del año, con la estimación de cerrar el curso con 800.000 líneas de banda ancha fija y móviles de postpago, lo que significa una mejora del 60 por ciento frente a la previsión anterior de 500.000 abonados. También estima un incremento de sus ingresos proforma del 18 por ciento, respecto a los 838 millones de euros de 2016, lo que viene a ser un repunte del 80 por ciento frente a la previsión anterior del 105. Asimismo, el grupo que dirige Meinrad Spenger apunta ahora a un ebitda recurrente de 235 millones de euros, más del doble que los 119 millones de euros proforma anteriores. Según se desprende de las cuentas del tercer trimestre del año, el cuarto operador ha obtenido un resultado neto ajustado de tres millones de euros, frente a las pérdidas de 8,66 millones del mismo periodo de 2016. Por el contrario, en el acumulado de los nueve primeros meses del año, la compañía se anota en unas perdidas de 148 millones de euros, debido a los números rojos de 151 millones del primer semestre tras el ajuste contable por los bonos convertibles de ACS. MásMóvil ha logrado un ebitda recurrente en el tercer trimestre del año de 64 millones del euros, un 86 por ciento más que el mismo período del año pasado, mientras que en los nueve primeros meses se eleva hasta 168 millones, un 87 por ciento más que el mismo período del año pasado.