Según el estudio Global Construction Survey 2017 de KPMGEl 93 por ciento de los directivos del sector de la construcción cree que la tecnología y la innovación modificarán significativamente sus negocios. Así se desprende del estudio Make it, or break it - Global Construction Survey 2017 de KPMG, que recoge las opiniones de más de 200 altos ejecutivos del sector de infraestructuras de todo el mundo. Sin embargo, solamente un 5 por ciento considera que sus organizaciones están a la vanguardia en cuanto a madurez tecnológica, y menos de uno de cada diez utiliza sistemáticamente innovaciones del tipo plataformas digitales, análisis de datos avanzados, robótica o automatización de procesos, de acuerdo con los resultados del informe. Las grandes esperanzas albergadas por el estudio acerca del potencial tecnológico se entremezclan con las reservas sobre dónde invertir para lograr un efecto óptimo. En palabras de Ovidio Turrado, socio responsable de Infraestructuras de KPMG en España, "aquellos que se decantan por invertir en las tecnologías disruptivas adecuadas tienen la oportunidad de impulsar drásticamente sus resultados. Si bien el estudio revela que los actores sectoriales muestran un gran entusiasmo por la revolución digital, la implementación de las acciones todavía es reducida". En las respuestas obtenidas de las empresas españolas, se observa que a pesar de mostrar preocupaciones por las barreras de entrada a los cambios tecnológicos, las firmas encuestadas ya han desarrollado una hoja de ruta para la implementación de la transformación tecnológica en sus negocios. Entre las barreras más destacadas a la implantación de nuevas tecnologías destacan la rentabilidad de las inversiones y el choque cultural. La incorporación de la generación millennial a las compañías de la industria descubre las limitaciones para el control de los aspectos "soft", más relacionados con el desempeño de la cultura de la empresa y otros aspectos intangibles.