La Bolsa de Toronto excluye de cotización a la compañía, que venderá activosAbengoa comunicó ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la venta a Algonquin de un 25 por ciento de su participación en Atlantica Yield por un precio de 606 millones de dólares. La operación permitirá a la compañía hacer frente al pago de 70 millones que tiene que realizar, ya que le supone registrar una plusvalía de 96 millones. Así, la empresa ha concedido una opción de compra a Algonquin sobre el paquete restante del 16,5 por ciento durante un periodo de 60 días tras el cierre de la operación, así como un derecho de tanteo para el primer trimestre de 2018. Abengoa ha pactado un precio de 24,25 dólares por acción, así como una cláusula que le permitirá beneficiarse de una posible revalorización de las acciones hasta un máximo de 60centimos por título en un plazo de un año y logra de este modo el dinero para poder hacer frente a la decisión del magistrado del juzgado de lo Mercantil número 2 de Sevilla, Pedro Márquez, que denegó todas las peticiones de complemento que hizo Abengoa a la sentencia del pasado 29 de septiembre en la que daba parcialmente la razón a los acreedores díscolos que impugnaron el plan de reestructuración. La propia Abengoa estimó que la deuda de estas firmas se situaba, en el momento de la homologación de la refinanciación, en el entorno de 72 millones de euros. El 23 de octubre, los acreedores aprobaron por unanimidad una tregua con la que la ingeniería que preside Gonzalo Urquijo borraba cualquier riesgo del vencimiento anticipado de la deuda reclamada -y ahora excluida de la refinanciación- por los impugnantes que, de acuerdo con los cálculos oficiales de la empresa, asciende a 72 millones de euros. La dispensa se produce en paralelo a la liberación, por parte de los bancos y hedge funds que participaron en la inyección de liquidez, de 53 millones de dólares (45,3 millones de euros al cambio actual) para reactivar la ejecución de la planta de cogeneración A3T de México, de 220 MW. La venta de la central mexicana se producirá previsiblemente el próximo año, una vez se culmine su construcción. Se estima que pueda ingresar unos 800 millones. Los 53 millones de dólares concedidos corresponden a la primera fase del tercer tramo de la liquidez que inyectaron la pasada primavera un grupo de bancos y fondos de inversión. Ese tercer tramo consta, en total, de 200 millones de dólares (171 millones de euros). La liberación de una primera cantidad se ha producido tras cumplirse ciertas condiciones impuestas en el plan de reestructuración, entre las que figura que la cotización de Atlantica Yield superara los 18 dólares por acción -ayer cotizaba por encima de 22 dólares-. Los 147 millones de dólares (126 millones de euros) restantes serán igualmente liberados según avance el proyecto y se cumplan determinados requisitos, entre los que sobresale la venta del 41,1 por ciento de Atlantica Yield, prevista para antes de final de año y por la que negocia con varios fondos, entre ellos, Brookfield.