El mayor banco de Portugal, Caixa Geral de Depósitos (CGD), ha reducido sus pérdidas hasta los 46,8 millones de euros en el tercer trimestre del año, cifra que supone una cuarta parte menos de los números rojos con los que cerró septiembre de 2016, cuando sumó un resultado negativo de 189 millones. La entidad explicó que el negocio en Portugal arrojó pérdidas de 226 millones, y que la actividad internacional registró beneficios de 179 millones. El margen financiero creció un 17,9 por ciento, hasta los 982,6 millones, gracias a la reducción de los costes de financiación. El producto bancario, equivalente a los ingresos de la entidad, aumentó un 45 por ciento, hasta los 1.668,1 millones. No obstante, los gastos se elevaron un 21,3 hasta 1.119,2 millones, por el programa de prejubilaciones y rescisiones de contratos. El crédito en riesgo se redujo hasta el 9,6 por ciento del total, 2,6 puntos porcentuales menos que en septiembre de 2016, y la ratio de solvencia CET 1 fully loaded se situó en el 12,8 por ciento, por encima de lo exigido.