Juan Osuna aterriza con la intención de mantener al equipo directivo actualOHL descarta, al menos por ahora, acometer una operación que implique la venta o una alianza corporativa que afecte a su división de construcción. De este modo, el grupo da por suspendido el proceso que abrió hace unas semanas con China State Construction Engineering Corporation (CSCEC), la mayor constructora del mundo. Esta decisión llega después de que haya traspasado su filial de Concesiones al fondo australiano IFM por 2.235 millones de euros y de nombrar a Juan Osuna, hasta ahora primer espada de OHL Concesiones, como consejero delegado en sustitución de Tomás García Madrid. Tras esta operación, OHL cancelará toda su deuda bruta con recurso, que se aproxima a los 1.500 millones de euros -incluidas las tres emisiones de bonos que tiene en circulación-. Con ello, Moody's y Fitch subirán previsiblemente sus calificaciones y facilitarán así el acceso a nueva financiación. Asimismo, la constructora repartirá un dividendo extraordinario que propiciará el saneamiento de su principal accionista, Grupo Villar Mir (GVM). La compañía convocará una junta extraordinaria de accionistas en torno al 20 de diciembre próximo para aprobar la desinversión, cuya liquidación se producirá a comienzos de 2018. En dicha asamblea es previsible que se proponga a los accionistas el pago del dividendo extraordinario, cuyo importe todavía no está fijado -una vez amortizada la deuda bruta aún le quedarán más de 700 millones-. Con la situación financiera resuelta gracias a la venta de Concesiones a IFM, que han pilotado el primer accionista y expresidente Juan Miguel Villar Mir y el nuevo consejero delegado, Juan Osuna, OHL da por zanjada la entrada de CSCEC ni de ningún otro grupo en el área de construcción. "En este momento no estamos considerando ninguna operación corporativa", señala un portavoz oficial de la compañía, que abunda en que el proceso con la firma china "se ha discontinuado". El grupo revisará su plan de negocio, que estará centrado fundamentalmente en la actividad de construcción e ingeniería en sus ocho home markets y mantendrá las patas de desarrollos y servicios, sin cerrar la puerta a oportunidades en concesiones. Para esto último, no obstante, no prevé crear una división específica por el momento, después de que con la compra, IFM se haya hecho con todo el equipo de OHL Concesiones -salvo Osuna-. Tras el profit warning de julio, las estimaciones oficiales de OHL apuntan a que la actividad de construcción registrará unos ingresos de 3.800 millones en 2017 -frente a los 4.400 millones previstos anteriormente- y el resultado bruto de explotación (ebitda) alcanzará los 150 millones -frente a 170 millones-. El nuevo consejero delegado, que tomó el mando del grupo ayer mismo, con Juan Villar Mir de Fuentes como presidente, aterriza en la silla ejecutiva de OHL con la intención de mantener al equipo directivo que ha acompañado a García Madrid los últimos 16 meses.