E ntre enero y septiembre, las empresas de renting compraron entre turismos y vehículos comerciales un total de 189.990 unidades para ponerlos a disposición de sus clientes. Eso supone un 21,8 por ciento más que en los tres primeros meses del año pasado, según los datos de la Asociación Española de Renting (AER) con los registros de la DGT. Un incremento que deja muy atrás al resto de la automoción. En los tres primeros trimestres del año, las matriculaciones de turismos aumentaron en conjunto un 6,7 por ciento y los comerciales un 16 por ciento. Por tanto, como se apunta desde el sector del alquiler a largo plazo, la mejoría económica explica solo una parte del impulso en la tendencia del uso de la modalidad de renting en España. Otra parte se deriva del mayor dinamismo que están mostrando las empresas en la adquisición de vehículos frente al canal de particulares. Buena muestra es el crecimiento del mercado de comerciales gracias a la adquisición y renovación de flotas corporativas. Algo que también se detecta en el mercado de turismos, donde el canal de empresas está creciendo al 14 por ciento, cuando los particulares están en un raquítico 2,2 por ciento hasta septiembre. Aun así, la compras de renting están aumentando a mayores ritmos que las compras directas de las empresas, lo que, desde el sector, achacan a una mayor penetración del renting en nuevos nichos de clientes. Las pymes son quizá el principal, ya que cada vez es más frecuente que las empresas pequeñas y medianas estén volviendo al alquiler frente a la compra. Varios datos defienden esta opinión del sector. El más obvio es que el renting está ganando peso sobre el conjunto de las matriculaciones. En septiembre alcanzó un 17,23 por ciento del total de los 1.097.171 turismos y comerciales vendidos a lo largo del año. Dos puntos más que en el mismo periodo del pasado año, cuando las matriculaciones del renting sumaron el 15,33 por ciento del total del mercado. Y casi el doble que en 2009, cuando coparon el 9 por ciento del total del mercado en los tres primeros trimestres del año. No obstante, el peso del renting sobre el conjunto de las compras corporativas de empresas se ha reducido ligeramente en el tercer trimestre. En 2016, el canal de empresas no alquiladoras adquirió 322.276 vehículos, un 33,02 por ciento mediante renting, mientras que en los nueve primeros meses de este año, el canal de empresas adquirió 367.334 vehículos entre turismos y comerciales, un 32,6 por ciento por renting, casi medio punto inferior al pasado año. La evolución de la flota es otro testigo de cómo el renting está ganando clientes abriendo el abanico a otros nichos. En septiembre, las operadoras que compiten en el mercado español gestionaban en conjunto 544.339 vehículos, un incremento del 10,8 por ciento respecto a 12 meses atrás, unos 50.000 coches más. De esta nueva flota, una parte -que el sector considera pequeña-, proviene del aumento de parque de grandes empresas, clientes clásicos; sin embargo, la mayor tajada procede de esos nuevos clientes que se están adhiriendo al alquiler a largo plazo. El sector descuenta que en 2018 se sobrepasará el récord de 571.000 unidades gestionadas en renting alcanzado en 2008. Aquel año, las pymes suponían cerca del 35 por ciento del total del parque, una cifra que ya se ha alcanzando actualmente. Autónomos y particulares Pero si el pasado año el tirón estuvo sustentado casi en exclusiva por la aportación de los nuevos contratos alcanzados por las operadoras para pequeñas y medianas flotas, a finales de 2016 ya se detectó el peso creciente de los particulares y los autónomos, que empiezan a conocer las bondades del renting frente a la propiedad. Una tendencia que se ha consolidado en lo que va de 2017. A finales del pasado año, del total de la flota gestionada, el 3,57 por ciento, 17.370 vehículos, estaba cedido a particulares y autónomos. En septiembre de este año, el porcentaje se ha incrementado hasta el 4,84 por ciento, lo que supone 26.350, unos 9.000 más en solo nueve meses. "Los esfuerzos que están haciendo las compañías de renting por transmitir las ventajas entre los autónomos y los particulares están surtiendo efecto y, trimestre a trimestre, vemos cómo la flota de estos dos colectivos va escalando posiciones. Hay que seguir alentando la idea de que el renting es un servicio para todos, porque aún hay sectores de la sociedad que lo desconocen. Sin embargo, es un hecho que el renting se está popularizando y eso lo demuestra no solo el crecimiento del peso de este sector en las matriculaciones totales, que copa un 17,32 por ciento, sino, sobre todo, el hecho de que de cada 100 vehículos en renting en España, casi cinco corresponden a autónomos o particulares. "Estamos en pleno proceso de cambio del modelo de movilidad y el renting está jugando un papel importantísimo en esta transformación social", declara Agustín García, presidente de la AER. Aunque, en el conjunto de la flota, la aportación de particulares y autónomos supone poco, la tendencia es creciente y numerosas operadoras de renting tienen en marcha planes piloto para clientes particulares, o en estudio, lo que supondrá un incremento exponencial en los próximos meses. Otro factor que explica el fuerte aumento de las matriculaciones y la flota de renting en lo que llevamos de año es el interés que esta modalidad financiera está despertando en las empresas de alquiler que, cada vez más, contratan coches mediante renting para luego alquilarlos a corto. Son conocidos como renting-RAC y están ganando peso en el conjunto del sector. Entre enero y septiembre, de los 189.990 vehículos matriculados como renting, el 36,9 por ciento, es decir, 70.152, se destinaron a empresas de alquiler sin conductor, 20.000 más que en los nueve primeros meses de 2016, cuando el renting-RAC copó el 31,8 por ciento del total de las compras. Por lo que en doce meses, ha ganado cinco puntos. A dos dígitos Algunas operadoras de renting denostan la cesión de vehículos a las empresas de alquiler, al considerarlo un negocio distinto al puro renting. Es frecuente que las alquiladoras suelan limitarse a financiar los vehículos sin utilizar prácticamente ninguno de los servicios que ofrecen las operadoras a sus clientes clásicos. No obstante, las operadoras que ceden vehículos de renting-RAC defienden que esta actividad no se puede despreciar en un país turístico como España e implica unos ingresos tan lícitos como los procedentes de empresas no alquiladoras. Un actividad que ha contribuido a que la facturación del renting en los tres primeros trimestres alcanzase los 3.615 millones de euros, un 10,3 por ciento sobre septiembre del ejercicio pasado, cuando los operadores ingresaron 3.277 millones de euros. Por su parte, las empresas fabricantes de automóviles obtuvieron de los coches adquiridos por el sector 3.560 millones de euros, con un crecimiento del 20,23 por ciento. Un aumento de dos dígitos que se ha sostenido en los dos últimos trimestres, aunque por debajo del 12,6 por ciento que se registró en el tercer trimestre del pasado 2016. Motores alternativos Las distintas modalidades de vehículos eléctricos (eléctrico puro, de autonomía extendida, híbrido enchufable gasolina e híbrido enchufable diésel), tanto turismos como comerciales, concentraron la matriculación de 1.196 unidades en renting hasta septiembre, lo que eleva el porcentaje de penetración de esta energía al 0,64 por ciento del total de las compras del sector; mientras que las 5.211 unidades de eléctricos que se matricularon en el total del mercado significaron un 0,47 por ciento. "El peso que aporta el renting a las matriculaciones totales de eléctricos es de un 22,95 por ciento", resaltan en la AER. Sobre las duración de los contratos de renting firmados hasta septiembre, el plazo medio de vigencia se situó en 44,96 meses, ligeramente inferior a los 45,21 meses en el mismo período de 2016. En el caso de la penetración geográfica del alquiler a largo plazo, las comunidades autónomas de Madrid y Cataluña siguen dominando de forma abrumadora el mercado, con cerca de seis de cada diez unidades matriculadas. Así, Madrid se queda con el 43,94 por ciento del total y Cataluña el 24,66 por ciento. Esto se debe a dos factores: por un lado, la fuerte concentración de grandes empresas en Madrid y Barcelona, pero existe también un efecto fiscal. Muchas empresas de renting matriculan sus vehículos en pueblos de la periferia de ambas capitales para beneficiarse de unos impuestos de circulación más favorables. En cualquier caso, muchos de los coches que se matriculan en Madrid y Cataluña pueden prestar servicio en delegaciones de los clientes repartidas por toda la geografía nacional. Respecto a las marcas, Renault continúa siendo el fabricante con mayor penetración en el sector, si se suman turismos y comerciales. En estos últimos domina con claridad, pero en turismos suele compartir liderazgo con Volkswagen. En crecimientos, en lo que va de año destacan, sin embargo, el fabricante español Seat, que con dos coches en el top 10 de los modelos más demandados por las operadores de renting -Seat León y Seat Ibiza- registra un incremento cercano al 30 por ciento sobre las ventas de los nueve primeros meses del pasado año. Un crecimiento muy similar al que ha registrado Audi, la marca premium del grupo Volkswagen al que también pertenece Seat, que aumentó ventas un 29,67 por ciento en septiembre, aunque no coloca ningún modelo entre los diez más demandados por el renting. En tercer lugar, la japonesa Nissan, perteneciente al grupo Renault, registra el tercer mayor incremento, un 26,3 por ciento en sus ventas al canal de renting, gracias a su SUV Qashqai que se ha colocado como el vehículo más vendido en lo que va de año. Es la primera vez que este tipo de vehículos se coloca en cabeza. Comerciales Los vehículos comerciales continúan con gran fuerza. De los diez modelos más demandados por los clientes del renting, tres son furgonetas ligeras. La Kangoo de Renault, que se coloca en tercer lugar del ranking, la Partner II de Peugeot, la séptima, y la Berlingo de Citroën en octava posición. Respecto a las marcas, todas crecen en lo que va de año, con excepción de Ford, cuyas ventas caen un 0,22 por ciento, y Opel, un 21 por ciento.