El 'conseller' viaja a Bruselas para vender la versión del 'Govern'Día clave para Cataluña y nueva misión exprés del conseller de Exteriores del Govern, Raül Romeva, a Bruselas para ganar la batalla del relato al Gobierno español. Romeva compareció ante la prensa internacional con varios mensajes, algunas contradicciones, y sobre todo echó un jarro de agua fría a la idea de que el President Carles Puigdemont vaya a convocar elecciones para evitar la suspensión parcial de la autonomía. "Las elecciones no están sobre la mesa en este momento, no las llevamos en el programa", dijo Romeva. El exeurodiputado insistió en que la prioridad del Govern es abrir un espacio de diálogo. Al ser preguntado sobre la mediación internacional, Romeva llegó a decir que ellos nunca han solicitado la intervención extranjera. "No es un problema de mediación, sino de voluntad" para dialogar, zanjó. Romeva también se refirió a los líderes arrestados de la Asamblea Nacional Catalana, Jordi Sánchez, y Ómnium Cultural, Jordi Cuixart, como "prisioneros políticos" encarcelados por sus ideas. El conseller añadió que no van a detener sus planes independentistas porque el Gobierno ya está aplicando "de manera illegal" el artículo 155 de la Constitución y que "la represión y la judicialización" son las propuestas sobre la mesa para tratar con Madrid. Y volvió a repetir que la fuga de empresas representa solo un cambio de sede social, sin "impacto económico", aunque algunas estimaciones elevan el agujero a los 7.000 millones.