Carles Puigdemont prevé agotar el plazo del lunes a las diez de la mañana para responder a Mariano Rajoy sobre si ha formalizado o no la proclamación de independencia de Cataluña, pero ayer mantuvo reuniones en la Generalitat con consellers y representantes de JxSí, la CUP, la ANC y Òmnium Cultural para preparar su respuesta. El Gobierno central fue claro en la petición, ya que la respuesta de la que depende que se active el artículo 155 de la Constitución puede reducirse a 'sí' o 'no', pero los precedentes de las últimas intervenciones del presidente catalán dan margen a la ambigüedad, mientras sus aliados políticos en favor de la ruptura le están exigiendo abandonar las medias tintas y dar por activada la declaración de independencia. Aducen que no tiene sentido tenerla suspendida cuando el Gobierno central ha demostrado su nula predisposición al diálogo. La ANC fue la primera, el jueves, en instar a dar ese paso, y la CUP le siguió ayer con una carta dirigida a Puigdemont en la que le exige "la proclamación de la república", porque considera que es "la única manera para conseguir que la intervención de actores internacionales se haga con Cataluña reconocida como sujeto político". En declaraciones a la prensa, la diputada de la CUP Mireia Boya también apeló a la "dignidad de haber cumplido la ley del referéndum y haber ejecutado la voluntad popular". Además, en una entrevista a Radio Euskadi lamentó que la sociedad catalana "se está desmovilizando, porque nadie le sabe explicar bien qué pasó el martes". Desde una de las formaciones que forma parte de JxSí, Demòcrates, también presionaron ayer a Puigdemont a activar la declaración de independencia como réplica al requerimiento que le ha enviado el presidente del Gobierno, informó Ep, que también desveló que, el martes, todos los consellers apoyaron en la reunión del Consell Executiu que el president suspendiera la declaración de independencia, con la excepción de la titular de Enseñanza, Clara Ponsatí. Desde el PDeCat, las fuentes consultadas aseguraron que no hay diferencias y que cierran filas con el presidente de la Generalitat, pero insinuaron que desde ERC no habían hecho su trabajo para tener bajo control aspectos como la Justicia y la Hacienda catalana, estructuras de Estado que consideran básicas ante una declaración de independencia. Desde ERC, que celebra hoy un consejo extraordinario para posicionarse, explicaron ayer que "la mayoría" del partido ha entendido la suspensión de la declaración a favor del diálogo, pero que generó desilusión por considerar que se trataba de una oportunidad histórica. El expresidente de la Generalitat Artur Mas, que últimamente está volviendo a la esfera pública, señaló en una entrevista de TV3: "Si creemos que la independencia es simplemente proclamar la república es que no conocemos la realidad", incidiendo en que debe contar con el reconocimiento internacional. También consideró que la principal "batalla" del Govern es que las próximas elecciones sean constituyentes, y negó que se haya planteado presentarse como candidato, aunque sí le gustaría ejercer un cargo de representación en el exterior en una eventual república catalana. El delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo, dijo en Radio 4 que quienes quieren el 155 son quienes presionan a Puigdemont.