El productor musical Rafael Tena, hermano del fallecido cantante Manolo Tena, se defiende en esta entrevista en elEconomista tras ser señalado como uno de los principales investigados en la conocida como trama de La Rueda, el posible fraude que investiga la Audiencia Nacional en los programas musicales nocturnos de las televisiones. Tena, que durante años ha sido el responsable musical de buena parte de la parrilla de Telecinco, afirma que la propia SGAE ha sido la culpable de que este sistema se corrompiera. ¿Ha habido fraude en la música emitida por las televisiones? El comportamiento de las televisiones fue y es absolutamente legal: decidieron montar sus propias editoriales e incluir en las mismas catálogos de obras musicales originales de autores españoles. Esta práctica, además de legal, es positiva tanto para los autores españoles, que acceden a una ventana de uso de música que le ayuda a poder vivir de su arte, y para las televisiones, que obtienen, como editores de SGAE un ingreso adicional por el uso de la música en televisión. ¿Pero este modelo funcionó sólo en las televisiones? Este sistema es exactamente el mismo que han hecho desde el siglo pasado EMI, Universal, Warner, Sony y demás multinacionales de la música. Estas discográficas en muchos casos te decían "si quieres que te publiquemos un disco, nos cedes tus derechos de autor y nosotros te retornaremos parte del lucro que obtengamos con los mismos". Lo mismo hacían las emisoras de radio, y el ejemplo es Nuesa, la editorial de Prisa con José Manuel Gómez Bravo al frente: si querías sonar en Los 40 Principales, tenías que ceder tus derechos de autor. ¿Cree que pudo haber alguna ilegalidad con 'La Rueda'? Sí, rotundamente sí, pero no para estar en la Audiencia Nacional. Registrar una obra de Mozart como propia es una falsificación documental y una estafa, y son prácticas contra las que SGAE y todos nosotros debemos combatir. El problema es que se ha mezclado todo en la misma saca, lo han agitado y estamos todos ahí, tanto aquellos que nos dedicamos a trabajar e intentar vivir de la música como los que se dedican a tratar de enriquecerse mediante engaño. ¿Es normal que los autores cedieran la mitad de los derechos a las editoriales de las televisiones? El famoso "retorno" la verdad es que es un absurdo. Los policías y los jueces andan muy perdidos en esto porque están buscando algo que no existe. Me explico: el autor no cede al editor un porcentaje de sus derechos, sino que mediante el contrato editorial se ceden todos los derechos de explotación de la obra musical al editor, es decir, el cien por cien. El 50 por ciento, o lo que se pacte, es la retribución que percibe el autor por el uso de sus derechos que propicia el editor al difundir, divulgar y promocionar la obra. Esto es lo que han hecho, y hacen, los editores de las multinacionales discográficas, las televisiones, lo que hizo Prisa en los 90. No hay trampa ni cartón. ¿Ha habido malas prácticas en las cadenas de televisión? Sólo puedo decir que la CNMC ya se pronunció sobre las condiciones ofrecidas en la presidencia de Antón Reixa a Antena 3 y Telecinco. Y aunque la CNMC dictaminó que la práctica de las televisiones consistente en programar su propia música era perfectamente lícita y lo que era ilegal es que SGAE impusiera, desde el monopolio que tiene, cómo debían programar la música las televisiones, el único perjudicado fui yo, que me despidieron injustamente y por la gestión de Reixa de Telecinco. ¿La SGAE pudo haber acabado con el sistema? A mí Reixa me decía que cómo era posible que pudiera pagarse tanto dinero por un músico tocando de fondo en un programa y le respondí: "La culpa es tuya y de la SGAE por fijar tarifas por disponibilidad para las televisiones. Cámbialas y veras qué rápido desaparecen los problemas". Nunca lo hicieron y el problema sigue enquistado aún en la actualidad. ¿Y quién denuncia entonces el sistema de 'La Rueda'? Fue Reixa el que abre una investigación como una cortina de humo para que nadie hablara de lo importante que, a mi juicio, era el golpe de Estado que estaban dando en la SGAE. ¿Un golpe de Estado? Totalmente. Reixa fue aupado por los grandes grupos discográficos, dueños de las editoriales, para servir a sus intereses. Y Reixa propició el reparto del denominado "pendiente de identificación" con más de 100 millones de euros, un reparto a mi juicio del todo irregular donde empleados de Warner y multinacionales editoriales entraron a la SGAE a identificar miles de obras. Yo denuncié ese reparto ilegal a los pocos meses porque, a mi entender, hay indicios de apropiación indebida y administración desleal. ¿Hay que cambiar el sistema actual de recaudación en televisión? Eso mismo piden ahora los autores de Coalición Actoral. El problema es qué pasará si las televisiones dejan de usar copyright y pagan 50 euros por usar copyleft de encargo. ¿Será ese un sistema mejor que el que tenemos actualmente? ¿Es tan ilusa Coalición Autoral como para pensar que está ayudando a los autores con estas acciones? ¿Qué van a decir a los músicos de televisión en junio cuando ninguna televisión haya pagado?