Confía en que las empresas aguanten bien la tensiónFitch ha seguido los pasos de Standard & Poors y colocó las calificaciones de crédito de Cataluña en revisión para una posible rebaja por el nuevo deterioro en las relaciones institucionales entre el gobierno regional y el central tras el referéndum de independencia del pasado domingo. La agencia también ha puesto en revisión negativa los rating del Instituto Catalán de Finanzas. Fitch, que califica a ambos emisores con el rating a largo plazo de "BB", tiene programada la siguiente revisión para Cataluña el próximo 22 de diciembre. Aunque a medio plazo Fitch sigue pensando que la actual tensión se rebajará y que el Gobierno español seguirá apoyando el pago de la deuda de Cataluña, cree que existe el riesgo de que los acontecimientos se descontrolen por la creciente incertidumbre, lo que podría a llegar a impactar el apoyo financiero a Cataluña y poner en peligro el servicio de la deuda regional, informa Reuters. En este contexto, la agencia de calificación crediticia Fitch considera que la diversificación geográfica de la mayoría de las empresas españolas calificadas, junto con un probable deseo político de mantener servicios clave, limitaría los riesgos de estas empresas en el "improbable" caso de que Cataluña se independizara de España. En un comunicado, Fitch ha argumentado que las empresas con sede en Cataluña o con activos significativos allí podrían enfrentarse a alteraciones, pero no ve "ninguna amenaza a las calificaciones, a menos que haya un deterioro significativo de la situación política". Asimismo, señala que su premisa es que se produzca "un movimiento prolongado hacia una mayor autonomía" para la región, aunque se podría complicar por el carácter conflictivo del voto sobre la independencia, pero añade que es poco probable que esto afecte significativamente los perfiles de crédito por la elevada diversificación.