La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional confirmó ayer que el socio de Deloitte, Francisco Celma, que firmó las cuentas con las que Bankia salió a bolsa en mayo de 2011, será procesado. Celma recurrió el fin de la instrucción del caso alegando que su función como auditor es tan externa como la del Banco de España y la CNMV, organismos que, pese a la insistencia de las acusaciones populares, no serán procesados. Los jueces, sin embargo, rechazan este argumento y aseguran que Celma analizó y verificó las cuentas que se presentaron en la salida a bolsa, actuaciones sin las cuales las autoridades reguladoras y supervisoras no hubieran permitido a Bankia el salto al parqué. La Sala también ha rechazado el recurso interpuesto por el exconsejero de la entidad José Antonio Moral Santín, quién alegó que él confiaba en la bondad de lo que se aprobaba en los consejos. La Audiencia señala que el argumento no es atendible dado las responsabilidades que ostentó antes de incorporarse al mismo, ya que fue vicepresidente de Caja Madrid.