A partir de ahora supervisará a la entidad, de la que el 'holding' posee el 40%El BCE ha dejado de supervisar y vigilar a Criteria tras cumplir con sus exigencias, entre las que destacaba perder el control sobre CaixaBank. Hace año y medio, el grupo catalán pactó con el regulador comunitario rebajar del casi el 60 por ciento al 40 por ciento su participación en la entidad financiera antes de finales de 2017, además de reducir su peso en el consejo de administración, con el objetivo de que Criteria perdiera la condición de conglomerado financiero, un estado que le penalizaba por las participaciones industriales que acumula y que consumen capital. Además, CaixaBank se comprometió a designar un consejero cordinador y a no sobrepasar en 1.100 millones la financiación a su matriz en los siguientes doce meses a la desconsolidación. En todo este tiempo, el complejo catalán ha venido adoptando medidas para cumplir con estos compromisos. En la actualidad, por ejemplo, Criteria ostenta un 40 por ciento del capital de la entidad en la que ejerce de coordinador del órgano rector Francesc Xavier Vives desde mediados de junio. Tras comprobar que la matriz ha dejado de ejercer una influencia dominante, el BCE decidió ayer que a partir de ahora será CaixaBank, junto a sus filiales, el grupo supervisado. Este cambio, de acuerdo con las normas internacionales, permitirá a Criteria contabilizar su participación en la entidad financiera como asociada, al mantener aún una influencia significativa. El holding es un vehículo de inversión de la Fundación La Caixa, que, además de CaixaBank, dispone a día de hoy de empresas en distintos sectores, entre los que destacan Abertis, Gas Natural, Cellnex, Saba y Suez. También controla menos de un 10 por ciento del banco mexicano Inbursa y del 17 por ciento del chino BEA. Por su parte, CaixaBank está presente en Telefónica, con un 5 por ciento, y en Repsol, con casi un 10 por ciento.