Campofrío cerró el primer semestre del año con un beneficio neto de 17,3 millones de euros, lo que supone una caída del 15 por ciento respecto al mismo período del 2016, mientras que sus ventas netas aumentaron un 3 por ciento, hasta superar los 945 millones de euros. Así se desprende del avance de sus resultados económicos -todavía sin auditar- divulgado ayer en su página web. La emrpesa obtuvo en estos seis primeros meses un resultado bruto de explotación (ebitda) de 68,6 millones, un 2,5 por ciento más. Campofrío, presente en siete países europeos, es propiedad ahora del grupo mexicano Sigma.