El expediente de empleo, el tercero de la aerolínea desde que forma parte parte de IAG, durará hasta finales de 2019Iberia y la representación de los trabajadores cerraron ayer la negociación para el inicio de un nuevo expediente de regulación de empleo (ERE) voluntario para un máximo de 955 trabajadores, de los que 715 son del colectivo de tierra, 170 tripulantes de cabina de pasajeros (TCP) y 70 pilotos. El cupo para el colectivo de tierra se divide entre la dirección Técnica (165 trabajadores), Servicios Centrales (240) y Servicios Aeroportuarios (310), de los que 260 son de Handling (asistencia en tierra) y 50 de Carga. Este nuevo ERE, que tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre de 2019, se realiza, a diferencia de los anteriores, por cuestiones técnicas, organizativas y productivas, y no económicas, y está dirigido a colectivos, áreas geográficas y unidades específicas, según fuentes sindicales. Las dos partes han pactado paralelamente una garantía de empleo para que aquellos trabajadores que permanezcan en Iberia tengan asegurado su puesto de trabajo durante el periodo de tiempo que dure el ERE. En Iberia trabajan acturalmente 14.799 personas y el nuevo ERE supondrá la salida de hasta el 6,5 por ciento de la plantilla. El acuerdo mantiene el carácter voluntario, y se dirige a todo tipo de contratos fijos, mediante prejubilaciones, bajas incentivadas, recolocaciones diferidas y reducciones temporales de jornada. Sobre prejubilaciones, a los de 58 años que se acojan a la medida, Iberia les abonará en 12 pagas anuales la diferencia entre el 80 por ciento del salario regulador y la prestación de desempleo correspondiente, y desde los 60 años hasta los 65, serán 12 pagas y el 75 por ciento del salario. Para los trabajadores con 59 años cumplidos, el ERE contempla en 12 pagas anuales la diferencia entre el 80 por ciento del salario regulador y la prestación de desempleo correspondiente, y desde los 60 hasta los 65 años 12 pagas y el 78 por ciento. Para los empleados con 60 años cumplidos y hasta cumplir los 65 se prevé en 12 pagas anuales la diferencia entre el 80 por ciento del salario regulador y la prestación de desempleo correspondiente. Respecto de las bajas incentivadas, el ERE recoge 35 días por año trabajado con un máximo de 30 anualidades, y la garantía de recolocación en un plazo mínimo de un año y máximo de cinco.