La compra de 'bunds' la eleva 14 puntos, hasta los 115 puntos básicosCon las bolsas en rojo el viernes, después de que un día antes Wall Street viviese su peor sesión desde abril tras el mensaje de la Fed, de que no habrá más subidas de tipos este año, los inversores que buscaron cobijo ayer en la deuda lo hicieron de forma selectiva. Y la española no fue precisamente la elegida (tampoco la italiana, ni la griega). El aumento en la rentabilidad del bono español a una década y la caída que vivió la del alemán llevó a la prima de riesgo española -que mide el interés adicional que se exige a nuestra deuda a una década frente a la germana- a escalar 14 puntos básicos, hasta los 115 puntos. Es el salto más significativo en una sola sesión desde febrero. En concreto, el retorno del papel español a diez años subió del 1,43 al 1,56 por ciento (niveles que no visitaba desde julio); mientras que el del italiano también subió ligeramente, pasando del 2,02 al 2,03 por ciento. El del bund, en cambio, que suele ser el cobijo por excelencia cuando vienen mal dadas, siguió el camino opuesto relajándose del 0,42 al 0,41 por ciento. Esa disparidad entre el alemán y el español fue la encargada de llevar al termómetro del riesgo español a niveles no visitados desde julio, el mismo mes en que consiguió dejar atrás esa cota e, incluso, descender de la barrera psicológica de los 100 puntos básicos. Más dinero a la deuda Los que también recibieron parte del dinero que ayer se esfumó de las bolsas, un día después de que las actas del Banco Central Europeo (BCE) desvelasen su preocupación sobre la posibilidad de defraudar al mercado teniendo en cuenta las expectativas que éste se ha hecho sobre el devenir de su política, fueron los bonos franceses con término a diez años, cuya rentabilidad descendió del 0,722 al 0,71 por ciento ayer. Los inversores también se lanzaron a incluir en sus carteras deuda portuguesa, sueca, holandesa y suiza.