La entidad financiera prevé una caída media del PIB del 8% este añoBBVA Research pidió ayer al Gobierno que cuide "mucho" los detalles del diseño del ingreso mínimo vital en el que trabaja para que dicha renta mínima se destine a los colectivos que lo necesitan y para evitar que provoque un efecto desincentivador en los beneficiarios en la búsqueda de empleo y no haya "connivencia" con la economía sumergida. En el mismo sentido, un informe de la Fundación FAES critica la distorsión que puede causar este ingreso mínimo por trasladar una visión de "Estado paternalista asitencial", desincentivar la promoción personal y ser "destructivo" con las Cuentas Públicas, ya que podría llegar a elevar la deuda de la Seguridad Social en un 22,92%.El responsable de Análisis Económico de BBVA Research, Rafael Doménech, en la rueda de prensa telemática para presentar el informe Situación España, explicó que la entidad financiera prevé una caída media del PIB del 8%, con una tasa de paro del 20%, y un crecimiento del 5,7% en 2021, con un desempleo superior al 17% como consecuencia de la crisis del Covid-19.Doménech considera que el mo-mento actual de "fuerte caída" de la renta disponible en muchos hogares hace que la política de rentas para evitar el riesgo de pobreza severa o extrema sea ahora "más necesaria que en otros momentos". No obstante, defendió que las transferencias a hogares "deben seguir siendo dependientes de la situación de las personas que las reciban e incentivar su participación en el mercado formal de trabajo".El servicio de estudios del banco calcula que la economía española podría crecer una media del 5,7% en 2021, aunque cree que no se alcanzará el nivel previo a la crisis hasta 2022. Asimismo, calcula que la tasa de desempleo escalará al 20,5% este año y bajará al 17,3% el próximo ejercicio, mientras que el déficit público se disparará al 11% del PIB este año y la deuda pública al 120% del PIB.