El supervisor tomará medidas legales contra los bancos que no lo suprimanEl Banco Santander cancela finalmente la distribución de dividendo de 2019 y 2020, tras las exigencias del Banco Central Europeo (BCE) de retener capital por el coronavirus. La entidad comunicó hace dos semanas su intención de cancelar el pago de noviembre de este año a cargo de 2020 y dejar un único pago en 2021, sujeto a revisión. Su intención inicial era distribuir el de 2019. No obstante, ahora cambia su decisión y decide, acorde a la petición del supervisor europeo, eliminar el reparto. La medida afectará a los casi cuatro millones de accionistas que tiene el grupo financiero.El banco comunicó ayer esta decisión, tan solo un día antes de la celebración de la junta general de accionistas, que tendrá lugar este viernes a las 9 horas y en la que se votaría la propuesta de reparto del se- gundo tramo del dividendo a cargo del resultado de 2019, que en este caso se haría en acciones. De hecho, la entidad ya ha retirado este punto del orden del día. Los accionistas sí recibieron el pasado 1 de noviembre el primer pago a cargo de 2019, que fue en efectivo, y se distribuyeron 1.661 millones de euros. El BCE, ante la lentitud de las entidades europeas en comunicar la cancelación de dividendos, avisó este jueves que tomaría "medidas legales" contra las entidades que no cancelen el reparto a los accionistas. El supervisor exige que, al menos, no se retribuya a los socios de los bancos hasta octubre de 2020, fecha suficiente para poder evaluar el impacto económico que dejará el coronavirus. Según informa este jueves el banco a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la intención del consejo es "no proponer la distribución de dividendos a los accionistas hasta que no exista mayor visibilidad sobre los efectos de la crisis del Covid-19 y se conozca el resultado del ejercicio del 2020".Además, el órgano gestor de la entidad ha decidido convocar una junta de accionistas de carácter ordinario para octubre de 2020. En ésta asamblea, y en función del impacto que haya tenido el coronavirus, se decidirá si repartir o no la cuantía ahora suprimida, a cargo del ejercicio 2019.Capital para financiarEl objetivo de las autoridades supervisoras para prohibir los dividendos es que las entidades europeas retengan el máximo capital posible para poder destinarlo a financiar a familias y empresas que se hayan visto económicamente impactadas por el coronavirus. Bajo este mismo criterio, los supervisores han confirmado que serán flexibles con las entidades a la hora de exigirles provisiones para cubrir los créditos morosos. De hecho, el BCE ya ha comunicado que levantará la mano y no pedirá al sector poner en vigilancia especial los préstamos con un impago superior a 30 días, ni tampoco exigirá clasificar de forma automática como morosos aquellos que superen el impago de tres meses si la causa es por el coronavirus. Asimismo, tomará este mismo criterio con las hipotecas que no se paguen, porque los clientes se acojan a la moratoria hipotecaria aprobada por los Gobiernos. Por otro lado, el supervisor también ha pedido a las entidades revisar los bonus de los directivos para equipararlos con la situación económica que se está vivienda. Banco Santander, CaixaBank y BBVA ya han tomado medidas al respecto.