El presidente de BBVA pide coordinación con las autoridades para superar los efectos del Covid-19Defiende que ninguno de los consejeros está conectado con el caso de espionaje de VillarejoLa amenaza del coronavirus no ha podido evitar la presencia de Luis del Rivero, expresidente de Sacyr y espiado por el excomisario Villarejo por orden de BBVA, en la junta de accionistas del banco. Los asistentes al Palacio de Euskalduna de Bilbao apenas sumaban 200, por la recomendación del banco de evitar acudir al encuentro, y entre ellos, estaba por segundo año consecutivo Del Rivero, dispuesto a espetar el caso de espionaje al presidente de la entidad, Carlos Torres, y al consejero delegado, Onur Genç. El expresidente de Sacyr pidió a Torres que retire ya el título de presidente de honor de BBVA a Francisco González, imputado en el caso Villarejo desde el pasado otoño, y le otorgue la presidencia de honor a título póstumo a Emilio Ybarra, expresidente de la entidad, fallecido este verano. Del Rivero ha aprovechado su turno para recordar que entre la junta del año pasado y la actual la diferencia es que el banco está imputado por espionaje, varios directivos y exdirectivos también, además del expresidente González. Así, ha criticado la actitud de varios de estos investigados en sus declaraciones ante los tribunales (solo quisieron hablar ante el juez el expresidente de la entidad; el representante legal del banco, Adolfo Fraguas, y el expresidente de Distrito Castellana Norte, Antonio Béjar) al "actuar con ignorancia deliberada" ante la Justicia al defenderse bajo el argumento de "no sé", "no recuerdo" o "no he sido". Finalmente, ha pedido remodelar el consejo con cinco nuevos miembros vascos, que inicien una nueva época de colaboración con la Justicia y el Banco Central Europeo (BCE). El presidente Carlos Torres defendió que ningún miembro del consejo de administración de la entidad tiene conexión con el caso de espionaje. Asimismo, aunque reconoció que 2019 fue "un año con profusión de noticias en España" sobre la trama, aseveró que el banco ha colaborado con la Justicia. En esta ocasión, a diferencia del año pasado que, de los 13 intervinientes, todos ellos de una manera u otra sacaron a relucir el caso Villarejo, solo cinco accionistas de los 14 que tomaron la palabra pusieron el tema sobre la mesa. En el turno de respuestas, Torres explicó que el banco aún no ha hecho ninguna provisión económica para afrontar las consecuencias que se puedan derivar de la investigación, puesto que es difícil de calcular debido a que la instrucción está aún en un estado incipiente. Impacto del coronavirusTorres pidió en su discurso coordinación a las autoridades, supervisores y empresas, para mitigar el impacto social y económico por las medidas adoptadas por el coronavirus. El presidente del banco señaló que la estimación de crecimiento para España de 2020 era de una mejoría de hasta el 3,2%, motivada por la relajación de las tensiones comerciales y mejores datos de producción a nivel global. Sin embargo, el entorno económico global se ha visto afectado negativamente por el impacto del coronavirus. A su juicio y a corto plazo, la incertidumbre ante el rápido crecimiento de los contagios en numerosos países y las medidas de cuarentena llevarán a una reducción de la demanda a nivel global, así como disrupciones relevantes en las cadenas de suministro.Todos estos factores, junto con el reciente desplome del precio del petróleo, se han traducido en fortísimas caídas en los mercados de capitales globales y en una elevada volatilidad, según señaló. Por tanto, aunque reconoció que aún es pronto para prever el impacto económico en los próximos trimestres, Torres aseveró que BBVA estima que, incluso en un escenario de recuperación en V, el crecimiento global podría reducirse en torno a medio punto del PIB en 2020.Por su parte, el consejero delegado, Onur Genç, quien por primera vez dio su discurso en castellano, resaltó la "solidez" de la entidad en un contexto de "fuertes caídas y alta volatilidad" en los mercados financieros, derivado del pánico por la expansión del coronavirus Covid-19. Al mismo tiempo, el banquero turco señaló que BBVA es un banco "fuerte" y que está preparado para afrontar cualquier riesgo. Posteriormente, Genç resaltó los resultados obtenidos en 2019, "los más altos de los últimos diez años excluyendo impactos singulares". El beneficio de BBVA fue de 3.512 millones de euros en 2019, cifra afectada por el deterioro del fondo de comercio de su filial en EEUU, por la mala evolución de los tipos de interés y la desaceleración de la economía. Los accionistas aprobaron los 15 puntos del Orden del día. Los cinco puntos relativos a la aprobación de las cuentas anuales, aplicación del resultado y la gestión social recibieron un respaldo por encima del 99%. En lo relativo a la reelección y nombramientos de los consejeros, el apoyo fue superior al 98%, a excepción de la reelección de la consejera Susana Rodríguez Vidarte, que consiguió un 96,8%, el menor respaldo, tras 18 años en el cargo. Asimismo, la aprobación de un máximo de remuneración variable para un colectivo de empleados se hizo con el 98,1% de los votos; la reelección del auditor fue del 99,6%; la aprobación de delegación de facultades en el consejo se hizo con un 99,5% y la remuneración de los consejeros, con el 93,5%.