La distribución asegura que no hay riesgo de desabastecimiento de alimentosEstanterías vacías, grandes colas en las cajas y desabastecimiento de algunos productos concretos, como papel higiénico, conservas o carnes envasadas dentro de los supermercados y grandes superficies comerciales de la Comunidad de Madrid y Vitoria. Ante el anuncio del cierre de los colegios, los ciudadanos hicieron ayer acopio de productos, ante la posibilidad de afrontar un periodo de dificultad para la compra de alimentos. Todo ello sin olvidar tampoco un problema repentino: la necesidad de cargar de reservas las despensas de unas casas que no tenían prevista la necesidad de alimentar a unos hijos que suelen hacerlo en los comedores escolares. Asedas, la patronal de cadenas de supermercados como Mercadona, Dia, Ahorramás o Covirán, confirmó que se está reforzando la reposición en las tiendas para garantizar que no hay ningún tipo de problema en el suministro de alimentos, algo que, según dicen, está totalmente garantizado, a la espera, eso sí, de que no surjan problemas en el sector logístico, que aunque ha pedido ayudas, mantiene su actividad con normalidad. Red de establecimientosUna portavoz de Asedas explicó ayer que "en España hay una tienda de distribución moderna, un supermercado o hipermercado, por cada 2.000 habitantes, por lo que no hay ningún tipo de problema". La asociación admite que "es comprensible que la gente quiera comprar y haya acudido a las tiendas, porque hay un millón de niños que se han quedado sin comedor escolar", pero insiste en pedir calma.El presidente de una de estas cadenas, Juan Roig (Mercadona), reconoció que ha habido una reacción de "compra impulsiva" en Madrid y Vitoria, pero al mismo tiempo aseguró que la situación es de tranquilidad, más allá del aumento de ventas de productos muy concretos. "Situaciones parecidas a esta crisis ya hemos vivido en el pasado, y siempre ha habido productos suficientes para abastecer a todos los clientes. Mercadona es muy eficiente y el sector también. Está garantizado el abastecimiento de los productos. Creo que después de un periodo de incertidumbre los seres humanos reaccionaremos y volveremos a la normalidad", aseveró Roig. Desde Anged, la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución, que representa los intereses de compañías como Carrefour, Alcampo, Eroski o El Corte Inglés, apuntan que las imágenes con estanterías vacías corresponden a "problemas puntuales" en algunos locales concretos, pero no implican que existan problemas de aprovisionamiento.El transporte de mercancías está empezando a notar los efectos del coronavirus en algunos puntos de la cadena logística, aunque todavía está muy lejos de dar la voz de alarma, como está sucediendo en el turismo. En los puertos de Valencia, Algeciras y Cartagena ya están registrando caídas del 20% en la llegada de mercancías por el freno de la actividad en China a principios de año, que tiene su reflejo en nuestro país unos 40 o 50 días después, ya que, dependiendo de las rutas, es lo que tardan en llegar los buques. En este punto, fuentes del Puerto de Valencia confirman un descenso de la actividad, pero aseguran que esta se recuperará en abril o mayo, ya que las fábricas ya han vuelto a funcionar en el gigante asiático y los buques se están llenando. Desde UNO logística señalan que todavía no hay "una alta afectación en las cadenas de suministro" por el stock de las navidades y las deslocalizaciones de producción, que ya no se depende tanto de China. En líneas generales, dentro de España (media distancia) no se está notando un descenso de la actividad, pero alertan del riesgo de que "se puedan romper las cadenas de suministro en el mes de abril" si la situación continúa. Fuentes de Ontruck, la plataforma que actúa como intermediario entre los transportistas y los proveedores, aseguran que febrero es un mes flojo para el transporte y que marzo "será la prueba de fuego" para ver si el sector se está viendo afectado. En este punto, las principales amenazas son el cierre de los centros de logística o almacenes en el norte de Italia o en algún punto de España por los brotes de coronavirus o las limitaciones que se impongan desde las Administraciones, o el temor de los propios transportistas a realizar viajes. "Lo que vamos a pedir al Gobierno es que bajo ningún concepto se cierren empresas por contagios, como por ejemplo, los centros logísticos, porque eso podría ser el final de la actividad del mismo. Que se desinfecte la zona, que se trate a los trabajadores, pero que no se ordene el cierre", señala Francisco Aranda, de UNO Logística.