La firma rebaja su previsión de margen de 2020 a una horquilla del 4,5% al 6%Siemens Gamesa Renewable Energy (SGRE) se desplomó un 9,08% en bolsa tras anunciar la segunda advertencia sobre sus beneficios –profit warning en inglés– de su historia; si hace tres meses, cuando cerró su ejercicio fiscal de 2019, preveía acabar 2020 con unos márgenes del 5,5% al 7%, ahora ha rebajado esas expectativas nada menos que un punto porcentual, dejándolas entre el 4,5% y el 6%. La empresa lo achaca a los malos resultados que ha cosechado en su primer trimestre, en el que ha perdido 174 millones de euros. Eran las 22.57 horas del miércoles cuando SGRE remitía un Hecho Relevante a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en el que informaba de los principales datos de sus resultados del primer trimestre de 2020 –se rige por el calendario alemán–, menos de una semana antes del día previsto para hacerlo, el próximo martes. La empresa dirigida por Markus Tacke brindaba con ello un nuevo susto al mercado, al anunciar un profit warning en toda regla. Es el segundo desde que se fusionaron la española Gamesa y la división eólica de la alemana Siemens –el primero fue en octubre de 2017–, pero la cuarta vez desde ese año en el que presenta unos resultados notablemente peores de lo previsto por los analistas.Culpa del inviernoEn esta ocasión la compañía lo achaca a "costes materiales e imprevisibles de carácter excepcional", como la llegada anticipada del invierno y el mal estado de las rutas en el norte de Europa, sobre todo en Noruega, que le han obligado a retrasar la ejecución de cinco instalaciones con 1,1 GW de capacidad total. La empresa avisaba, no obstante, de que está actuando para recuperar el tiempo perdido y de que no espera impactos adicionales. Sea como fuere, SGRE advertía de que el 4 de febrero presentará unas pérdidas de 174 millones, cifra muy alejada de los beneficios de 77,8 millones esperados por el consenso del mercado. Y añadía que, como resultado, ha revisado a la baja sus márgenes para todo el ejercicio: esperaba un margen ebit pre PPA y costes I&R del 5,5% al 7%, que ahora piensa se reducirán hasta una horquilla del 4,5% al 6%.También indicaba que la otra gran guía, las ventas, permanece intacta –de 10.200 millones a 10.600 millones– y que los pedidos cubren un 98% de la parte media de las dos magnitudes. Pero poco les importó a los accionistas, que hundieron los títulos de la compañía más de un 11% en cuanto abrió la sesión –hasta un mínimo del 13,84–, aunque durante el resto de la jornada los subieron, hasta cerrar con una bajada del 9,08% y dejarlos en 1,43 euros. La empresa hispanogermana lleva meses advirtiendo de "vientos de cara" –palabras de Tacke–, como la constante reducción del precio de venta de los aerogeneradores, la guerra comercial o el Brexit, e insiste en que considera este 2020 como un año de transición, al igual que el pasado 2019, pero no hace referencia a ellos en la información que ha facilitado. Desde luego, toda la industria eólica lo está pasando mal por la reducción de los márgenes –SGRE logró un 7,6% en 2018–, incluyendo sonadas quiebras, como la de Senvion.