La retribución regulada de las energías renovables –las antiguas primas–, costarán entre 6.393 millones y 6.490 millones de euros este 2020, alrededor de 1.000 millones menos que el pasado 2019, en que ascendieron a 7.439 millones, según los cálculos del Gobierno. La previsión de que la electricidad será más cara este ejercicio es el principal factor que explica esta reducción, del 14%.Las instalaciones renovables, la cogeneración y el tratamiento de residuos perciben unos ingresos regulados que dependen de numerosos elementos, como el importe de la inversión inicial en la planta, los costes de explotación y de los combustibles, los impuestos sobre la energía, el precio del CO2 o el de la venta de su generación en el mercado mayorista de la electricidad.La mayoría de estos parámetros retributivos se revisa cada seis años, al objeto de que las instalaciones obtengan una rentabilidad que el Gobierno fijó el pasado noviembre en el 7,4% hasta 2031. Además, cada tres años se acomete una revisión intermedia, que regulariza las variaciones de ingresos que se produzcan sobre las previsiones iniciales de cada período sexenal.Casi 64.000 instalaciones El Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco) ha sacado a información pública una Propuesta de orden ministerial con los parámetros retributivos del próximo período, entre 2020 y 2025. La memoria de impacto del proyecto normativo indica que las cerca de 64.000 instalaciones verdes percibirán este 2020 unos 1.000 millones menos de lo que han percibido el pasado 2019.Esta reducción debería notarse en el recibo final de los consumidores, pero el Gobierno ha decidido congelar su parte fija, correspondiente a los peajes, hasta que culmine la reforma que acomete junto con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. La rebaja de las ayudas responde, sobre todo, a la previsión de precio del mercado mayorista de la electricidad, también conocido como pool. El Miteco estima que este 2020 ascenderá a 55,85 euros por MWh, un 5% más que los 53,18 euros por MWh de 2019. Como la rentabilidad de las instalaciones no cambia, cuantos más ingresos obtengan del pool, menos ayudas deben recibir para obtener el citado 7,4%.Regularización de ingresosDe acuerdo con el Miteco, el aumento del precio del pool provocará una reducción de 740 millones a 750 millones de las ayudas. Además, tras regularizar los pagos de 2017 a 2019, la retribución regulada se reducirá de 260 millones a 270 millones adicionales, porque el precio del pool estuvo por encima de lo previsto.También influyen otros elementos, como la previsión de que se abaraten los combustibles –biomasa, gas, gasóleo y fuelóleo–, de que baje el número de horas de producción hidroeléctrica –afectada por el calentamiento global– o de que se encarezca el precio de la tonelada de CO2 en el mercado europeo de derechos de emisión.Para los años 2021 y 2022 los consumidores pagaremos más que este año para ayudar a las renovables, la cogeneración y los residuos, porque el precio del pool debería ser más bajo: 52,54 euros por MWh en 2021 y 49,36 euros por MWh en 2022. Como resultado, las ayudas –técnicamente denominada "retribución específica"– ascenderán a 6.643 millones en 2021.Esta retribución específica corresponde a las instalaciones históricas, conectadas a la red antes de 2014. Las plantas que se han instalado durante el año concluido, ganadoras de las subastas celebradas en 2017, no percibirán ayuda alguna, a menos que el precio del pool se hunda, algo que no está previsto para los próximos años.