Las temperaturas aumentarían en un 1,5 grados celsius entre 2030 y 2052 si el calentamiento global sigue el ritmo actual y si el mundo no toma medidas rápidas y sin precedentes para frenar el incremento, dijo el lunes un informe de Naciones Unidas. Según el informe presentado por el Grupo Intergubernamental de Expertos en Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), limitar el "calentamiento global requeriría cambios rápidos, de amplio alcance y sin precedentes en todos los aspectos de la sociedad", desde consumo de energía a planificación urbana y terrestre y muchos más recortes de emisiones. Este informe examina vías para limitar el calentamiento hasta 1,5 grados en vez de 2 grados, tal y como se estableció en el Acuerdo del Clima de París. Y advierte de que los efectos para ecosistemas y la vida en el planeta serán mucho menos catastróficos si se logra mantener esta barrera más ambiciosa.Este informe es considerado como la principal guía científica para los responsables de la formulación de políticas gubernamentales sobre cómo implementar el Acuerdo de París de 2015. No obstante, los objetivos acordados para reducir las emisiones no serían suficientes, incluso si hay recortes más grandes y más ambiciosos después de 2030. Para contener el calentamiento a 1,5 grados, las emisiones de dióxido de carbono tendrían que disminuir en aproximadamente un 45 por ciento para 2030 desde los niveles de 2010 y alcanzar un cero neto para mediados de siglo. El cambio climático está contribuyendo a un aumento de los fenómenos meteorológicos extremos y los desastres naturales relacionados con el clima. Cada vez más personas están perdiendo su base de soporte vital y se ven obligadas a abandonar sus hogares y emigrar a otros lugares. Cada año aumenta de forma preocupante el número de personas que se ven forzadas a dejar sus hogares debido a los desastres naturales.Más de 23 millones de personas fueron desplazadas por desastres climáticos extremos solo en 2016. Es probable que otros 140 millones de personas sean desplazadas como resultado del cambio climático para 2050. El informe Groundswell: Preparing for Internal Climate Migration desvela que el cambio climático involucrará a las personas más pobres de los países más pobres que se desplazan en grandes cantidades desde las regiones rurales a las áreas urbanas cada vez más sobrecargadas. Sin una planificación previa, tales cambios dramáticos de la migración podrían llevar a una interrupción importante e inestabilidad. Los puntos calientes de este escenario cubren tres regiones, África subsahariana, sur de Asia y América Latina, que representan el 55 por ciento de la población del mundo en desarrollo.Islas consumidasPor ejemplo, Kiribati, una de las naciones más remotas de la tierra (un archipiélago y país insular ubicado en la zona central oeste del océano Pacífico, al noreste de Australia) ha sido la primera víctima directa de la subida del nivel del mar a nivel mundial. Los pequeños Estados insulares como Kiribati y las Maldivas se han convertido en símbolos de los impactos potenciales del calentamiento global. A pesar de que se está trabajando para desarrollar defensas de primera línea contra los efectos del nivel del mar (plantaciones de manglares para prevenir la erosión costera y una mejora de los sistemas de recolección de agua de lluvia para proteger la calidad del agua), ya hay territorios que han desaparecido y que se denominan "nación ex situ". Los académicos de derecho ambiental ya han indicado que los ciudadanos de estas tierras conservarían algunos derechos como ciudadanos. Según el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de las Naciones Unidas, estos territorios comparten en su mayoría la fragilidad de una economía de subsistencia basada en el turismo, la dificultad en el desarrollo de las comunicaciones y la infraestructura, la falta de protección contra los desastres naturales y la dependencia del comercio internacional. El aumento del nivel del mar, una de las señales más claras del calentamiento global, se debe al calentamiento y la expansión del agua de los océanos, así como a la fusión de los glaciares de montaña, las capas de hielo y las vastas capas de hielo de Groenlandia y la Antártida.Hoy algunos territorios están en peligro. Las ciudades costeras son las más perjudicadas por el peligro de tsunamis. Por ejemplo, Macao, ubicado en la costa sur de China, se encuentra actualmente en una zona de terremoto importante, pero no tiene ningún riesgo real de tsunami: se necesitaría una magnitud de 8,8 para causar una inundación generalizada de tsunamis en esta región administrativa. Sin embargo, un aumento de medio metro en el nivel del mar, que se pronostica para 2060, casi duplicará el riesgo de tsunamis.Los científicos predicen que a medida que aumenten los niveles del mar, miles de islas se verán afectadas por inundaciones frecuentes, falta de agua dulce y daños a la infraestructura. Los mares han aumentado casi 20,32 centímetros en todo el mundo desde 1880, pero a diferencia del agua en una bañera, no se elevan de manera uniforme. Los científicos han indicado que el calentamiento global será la causa principal del aumento del nivel del mar. La mayor incertidumbre es cómo de rápido se derretiría la gran capa de hielo de la An-tártida Occidental.Los países y los grupos sociales en el Sur (global), que son particularmente vulnerables a las consecuencias del cambio climático, han contribuido menos al calentamiento global que los países del norte. Por lo tanto, estos tienen la obligación inmediata de multiplicar sus esfuerzos para acelerar la transición de los combustibles fósiles a las energías renovables.La actual crisis humanitaria en el Cuerno de África y Yemen es un ejemplo aterrador de poblaciones atrapadas sin poder hacer nada. Las precarias condiciones de vida de las personas, quienes se ven particularmente afectadas por las consecuencias del cambio climático y la degradación ambiental muestran que se deben hacer grandes esfuerzos para protegerlos mejor.Según el informe Migraciones climáticas: retos y propuestas desde el Derecho Internacional, presentado por fundación Ecodes, destaca que las mujeres de los países empobrecidos son las que más están sufriendo los efectos. "Cuanto mayor es la dependencia de un territorio de la agricultura, mayor es su incidencia sobre las mujeres", señala Beatriz Felipe Pérez, autora del informe. Terremotos y climaLos terremotos también están dejando últimamente huella en Estados Unidos, América del Sur, Asia y la costa de África. Las placas tectónicas cambiantes que conforman la corteza terrestre han sido muy activas. Las erupciones volcánicas, tsunamis y terremotos tienen relación directa con los comportamientos de los humanos sobre el medio ambiente. En abril de 2011, un estudio geológico difundido en Australia reiteró la posibilidad de que el cambio climático fuese potencialmente responsable a largo plazo del incremento en el movimiento de las placas tectónicas de la tierra y provocar terremotos. El aumento del nivel del mar puede incrementar significativamente el peligro de tsunami, lo que significa que los tsunamis más pequeños en el futuro pueden tener los mismos impactos adversos que los grandes tsunamis de hoy. Los huracanes funcionan con aire cálido y húmedo, por lo que los océanos son los que provocan su formación, a través de sus aguas templadas. La confluencia de los vientos y la humedad del mar producen fuertes presiones que generan los vientos huracanados. Una amenaza inusual que, sin duda, debe hacernos reflexionar sobre la fragilidad a la que hemos llevado el equilibrio natural necesario para la vida en la tierra.