La multa de 77,1 millones de euros impuesta a Mediaset y Atresmedia por cerrar el mercado de la publicidad abre la puerta a las televisiones pequeñas y los anunciantes a reclamar en los juzgados daños y perjuicios. Un camino que la industria en general no parece dispuesta a emprender, pese a que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha dado por probado que la política comercial de las cadenas, que tienen el 85 por ciento del mercado, "limitó la capacidad del resto de canales para captar ingresos por publicidad" y la de "elección" de los anunciantes. Este diario ha preguntado a los principales afectados por el supuesto duopolio y a las empresas y asociaciones personadas en el expediente y tan solo Kiss de Blas Herrero ha reconocido que está "estudiando presentar una reclamación por daños a Mediaset y Atresmedia para conseguir un resarcimiento". En este punto, fuentes de la compañía, que emite el contenido de Discovery, aseguran que "no tienen prisa" y que antes de dar algún paso quieren ver "qué pasa con el recurso que presenten las cadenas ante la Au-diencia y las cautelares". Además de Kiss, también están personadas en el expediente la Asociación Española de Anunciantes (AEA) y la Federación de televisiones autonómicas Forta, pero ninguna de las dos tiene previsto realizar algún tipo de movimiento, al menos en el medio plazo. Por un lado, la patronal de los anunciantes, que en más de una ocasión ha criticado al duopolio, porque considera que establece tarifas monopolísticas, ha asegurado que no está estudiando reclamar daños por estar limitada la competencia. Así, a la pregunta de este diario sobre si la AEA estudia abrir un proceso judicial contra Mediaset y Atresmedia tras la resolución de la CNMC, fuentes oficiales han asegurado que "no, no estamos estudiando hacer ninguna acción así como la que comenta". De todas formas, la resolución puede perjudicar al sector de la publicidad, ya que se enfrenta a mayores precios y las agencias pueden perder las extraprimas.La asociación de anunciantes firmó en 2017 un acuerdo de colaboración con la CNMC, ya que ambas consideraron "inquietante el duopolio televisivo" y en la resolución publicada por el superregulador explican que Mediaset y Atresmedia imponen cuotas mínimas de inversión y priman la contratación por paquetes, entre otras cosas.Por su parte, la Forta ha evitado hablar de la posibilidad de abrir algún tipo de frente judicial, algo para lo que tiene hasta cinco años. "Es un tema que requiere reflexión, análisis. Estamos leyendo la resolución y las consecuencias que la prohibición de ciertas prácticas comerciales puedan tener en el mercado. Queremos estudiarlo desde el punto de vista comercial y competitivo", explica Enrique Laucirica, director general de la Forta, que evitó hablar de reclamar daños. Kiss se personó en el expediente junto a otras teles pequeñas a través de la Asociación de Televisiones Privadas Digitales Terrestres. A lo largo de la investigación, Trece, que en 2016 firmó un acuerdo con Mediaset para comercializar su publicidad, abandonó la asociación y el proceso. Trece ahora la vende a través de Pulsa, que también utiliza la pauta única y la venta paquetizada, censuradas por la CNMC. También dio la espalda al proceso Vocento, que no va a demandar. No en vano tiene los canales alquilados a Viacom y Disney. La dueña de MTV no ha contestado. Por su parte, Ten, el canal de Secuoya, ha asegurado que "ahora mismo no tenemos una valoración fehaciente sobre este asunto". En este punto, no hay que olvidar que el negocio principal del grupo es la producción de contenidos y que entre sus clientes destaca Atresmedia. El Real Madrid no ha contestado a las preguntas de este diario, pero el sector asegura que no tienen intención de entrar en esta guerra. Mediapro no ha dicho nada.