El cantón suizo de Ginebra ordenó el pasado jueves a la multinacional estadounidense de transporte Uber detener sus operaciones en el territorio por incumplir las normas laborales locales, aunque la medida ha quedado en suspenso al ser apelada por la compañía. Las autoridades locales alegan que Uber incumple la legislación al considerar a los conductores de la compañía como socios y no como empleados. Uber puede continuar con sus actividades, pero estas tendrán que suspenderse si así lo ordena la justicia local. Para evitar un proceso judicial, señala el Gobierno cantonal, la compañía debería pagar impuestos por concepto de sus empleados con carácter retroactivo desde 2014, cuando comenzó a operar en la ciudad. Críticas en Bilbao La compañía a opera en Bilbao, cuyo ayuntamiento le acusa de haber actuado "con nocturnidad y alovosía". El consistorio ha advertido a la compañía de movilidad de que "tendrá problemas" si pretende prestar los mismos servicios que el taxi, instando además al Gobierno vasco a aprobar "con celeridad" el Decreto que regulará las condiciones de operación de los vehículos de alquiler con conductor (VTC).Ya el pasado verano Uber comenzó también a operar en La Coruña, por lo que ya está presente en total en nueve ciudades españolas.