Ibersotar ha unido filas con la Organización Mundial del Turismo (OMT) y la Fundación Impulsa Balears para liderar un proyecto que implantará el modelo de economía circular en el sector hotelero balear para sustituir el actual patrón lineal de producción y consumo, lo que logrará ahorros de 175 millones de euros en costes empresariales.Este proyecto llega en un momento crítico para la región, que ha sido una de las grandes damnificadas, junto a Canarias, por la quiebra de Thomas Cook. En este sentido, el director ejecutivo de la OMT, Manuel Butler, apuntó que la caída de uno de los "turoperadores más antiguos, se enmarca en el reordenamiento del sector", que está sufriendo una "transformación brutal". Así, Butler señaló que la sostenibilidad debe estar en el centro de esta transformación y por ello la OMT ha renovado su liderazgo en el programa One Planet. "Hoy no se puede ser competitivo si no se es sostenible", apuntó Antoni Riera, director de técnico de la Fundación Impulsa Balears, que destacó que "el sector hotelero es la rama que más aporta al VAB de Baleares, con 3.556 millones de euros, que suponen el 12,9 por ciento de la región". Esta aportación será aún mayor una vez que la planta hotelera de Baleares se sume al proyecto circularidad hotelera. De este modo, el peso del turismo en el PIB ascendería al 13,5 por ciento, estimó Riera. Según el directivo, este proyecto cuenta con una inversión inicial de 100.000 euros, en la que el Grupo Iberostar participa con el 70 por ciento del capotal. Según los cálculos de la Fundación Impulsa Balears, 2.497 empresas turístics consumen al año cerca de 800 millones de euros en materiales, por lo que reformular el modelo hacia una economía de carácter circular permitiría reducir la necesidad de materiales de la planta hotelera balear entre un 15y un 20 por ciento en 2030.