Iberia aseguró ayer que "sigue abierta al diálogo y a la negociación hasta el último minuto", dentro de los marcos adecuados acordados con los sindicatos, y que hará "todo lo posible" para que la huelga convocada por UGT entre el personal de tierra de la aerolínea en Barajas y su terminal de carga, para los días 30 y 31 de agosto, no llegue a producirse. En un comunicado, la compañía aérea señaló que la mayor parte de las reivindicaciones incluidas en la convocatoria de huelga están siendo ya tratadas en la negociación del XXI Convenio Colectivo del Personal de Tierra de Iberia, común para todos los empleados de este colectivo, y en todos los aeropuertos donde opera, que se vienen abordando en la mesa de negociación desde el pasado mes de septiembre. La sección sindical de UGT Iberia Barajas ha convocado una huelga para los días 30 y 31 de agosto entre el personal de tierra de la compañía aérea, para demandar un nuevo plan de empleo que "termine con la perpetua eventualidad", y transformar contratos de tiempo parcial a completo entre el colectivo, entre otros motivos. Los paros se unen a los convocados en El Prat (24, 25, 30 y 31 de agosto) y los anunciados en Bilbao, aún por fijar. Por su parte, el secretario general de UGT de Catalunya, Camil Ros, critió el "inmovilismo total" de Iberia ante los paros convocados en agosto por el personal de tierra en El Prat. Así, Ros aseguró que, "si nada cambia" en la mediación del jueves con la dirección de la empresa, la huelga prevista para este fin de semana y el que viene se producirá. El personal de tierra de Iberia en el Aeropuerto de Barcelona ha convocado paros el sábado 24, domingo 25, viernes 30 y sábado 31 de agosto.