El banco suizo UBS tiene previsto cobrar a los clientes particulares de alto patrimonio por tener más de 500.000 euros en sus depósitos, aplicando así una política de cobro de tasas a una mayor parte de sus clientes ricos. La medida se produce para compensar los tipos de interés negativos, que está mermando sus beneficios.A partir de noviembre, el mayor gestor de patrimonio del mundo introducirá una tasa del 0,6 por ciento anual a los clientes que tengan más de medio millón de euros. La tarifa, que se aplicará a los clientes de la unidad suiza del banco, es de 20 puntos básicos más que la tasa de depósito del Banco Central Europeo, de menos 0,4 por ciento. La medida amplía así el alcance de los cobros que hace ya desde algún tiempo, ya que el umbral era de 1 millón de euros.Los bancos se están preparando para un período de tasas de interés bajas o negativas más prolongado de lo previsto, reanudando los debates internos sobre cómo tratar a los clientes que tienen grandes depósitos en efectivo. La transferencia de las tasas negativas a personas adineradas es una tendencia que ahora se extiende a los saldos en euros, a medida que los bancos centrales preparan nuevos planes de estímulo para reactivar el crecimiento mundial. En España este cobro se está produciendo ya a las empresas con ciertos picos de liquidez en sus cuentas y en función de la vinculación con cada entidad. De momento, en nuestro país no se prevé que la aplicación de tipos negativos para los clientes particulares minoristas vaya a ponerse en práctica próximamente, pero no se descarta que en el medio plazo pueda llegar a producirse.La decisión de UBS llega después de que su rival suizo Credit Suisse señalara que introducirá una tarifa del 0,4 por ciento para los clientes con cuentas en euros de más de 1 millón de euros a partir de septiembre. UBS ya había anunciado que iba a imponer tasas negativas para los clientes que tengan grandes saldos en francos suizos, mientras que Credit Suisse dijo que también está considerando la medida.Los bancos llevan tiempo quejándose de las tasas de interés bajas o negativas, y el responsable ejecutivo de UBS, Sergio Ermotti, advirtió el mes pasado que una nueva relajación del precio oficial del dinero podría propiciar burbujas de activos. Muchos bancos ya transfieren tasas de interés negativas a los clientes institucionales, con saldos de cientos de millones, pero por lo general se han abstenido de hacer lo mismo con los clientes particulares por el temor a una fuga de dinero. Es más, el BCE ha alertado de tal posibilidad para evitar que esta política de precios prolifere en las entidades.