Enagás cumplirá "todos" los objetivos de su Plan estratégico 2019-2023, en los que prevé abonar 2.000 millones de dividendos, incluso si se culmina el hachazo a sus ingresos de 240 millones anuales que está planteando la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Así lo anunció su presidente, Antonio Llardén, durante la presentación de resultados del primer semestre, en el que redujo su beneficio un 1,6 por ciento, hasta 216,1 millones de euros, según lo previsto. La firma se dejó un 2,8 por ciento en el parqué madrileño.Según valoró Llardén ante los analistas, los servicios técnicos del Regulador "proponen una caída acelerada del sistema de ingresos de la compañía, de forma arbitraria y sin tener en cuenta el papel clave del gas en el contexto energético actual". Sin embargo, afirmó con rotundidad que mantiene "todos" los objetivos del Plan, "porque la empresa es extraordinariamente eficiente, porque tenemos una robustez financiera muy importante, que no todas las compañías tienen, y porque estamos aún definiendo esta regulación que no está aún definida".El Plan, de hecho, ya prevé una ralentización del pago al accionista, ya que el dividendo crece a un ritmo del 5 por ciento anual hasta alcanzar 1,68 euros por título en 2020, y luego –coincidiendo con la aplicación de la nueva retribución propuesta por la CNMC– a un mínimo del 1 por ciento anual hasta 1,74 euros por acción en 2023. Y además reserva más de 1.400 millones para uso discrecional.Poner en riesgo el sistemaLlardén, en todo caso, cargó contra la CNMC porque sus propuestas, más allá del impacto en la empresa –bajan sus ingresos como transportista de gas un 21,8 por ciento entre 2021 y 2026–, "ponen en riesgo la estabilidad y funcionamiento del sistema gasista español", en el contexto de la transición energética.El presidente también anunció que la empresa "adoptará las acciones y medidas jurídicas que resulten pertinentes" contra la propuesta de la CNMC para defender a sus accionistas y grupos de interés.En la presentación de resultados, las participadas extranjeras de Enagás volvieron a ser las protagonistas: le aportaron 80,2 millones al resultado bruto operativo (ebitda), que ascendió a 487 millones, prácticamente la misma cantidad que en 2018: 487,2 millones. Esta contribución foránea crece a buen ritmo y para el año 2021 podría superar el 40 por ciento del beneficio, según reveló Llardén, lo que supone un ligero adelanto en relación al calendario previsto anteriormente.La inversión ascendió a 645 millones, por los 618 millones destinados a adquirir el 11 por ciento de la norteamericana Tallgrass; en España el desembolso de capital fue de 22,9 millones.