Siete pasos para despedir a un trabajador de manera correcta

Para los jefes tener que despedir a alguien no es una tarea fácil, ni siquiera cuando tienen razones objetivas para hacerlo. De hecho, muchos ni siquiera saben cómo afrontar la situación.

Esto se debe a que los empresarios y los trabajadores siguen viendo un despido como algo traumático, y no como una oportunidad para encontrar algo más adecuado y satisfactorio, explica el consultor Dick Grote en un artículo en el Harvard Business Review. Por eso, el experto explica cuáles son los pasos adecuados para despedir a alguien.

1. Elegir el momento

Hay dos opciones: el lunes a primera hora, que favorece que el trabajador pueda empezar a buscar trabajo, y evita que pase un fin de semana abatido; o el viernes a última hora, que interrumpe menos al resto de trabajadores.

2. Claridad

Una vez establecido el momento, hay que citar al trabajador que se va a despedir y comunicárselo directamente, sin rodeos ni charlas previas para tratar de suavizarlo. "Juan, siéntante, tengo malas noticias para ti".

3. Usar el tiempo pasado

Una vez que se tiene la atención de la persona a la que se va a despedir, anunciársele que ha sido despedido, en tiempo pasado. Por ejemplo, "Juan, has sido despedido", mejor que "Juan, vamos a despedirte".

4. Tener en cuenta algunos aspectos

- No hay que decir que "se entiende cómo se siente", porque no es verdad.

- No decir que "el despido es lo mejor que le podía haber pasado", porque no lo es; es una cosa muy mala.

- Mantener una caja de pañuelos a mano.

5. Escuchar al empleado

La persona despedida puede reaccionar con negación, ira o dolor. Hay que escucharle y tratar de responder lo mejor posible.

6. Explicar lo que va a pasar

Hay que señalar con precisión lo que va a pasar a continuación: cuánto se le va a pagar, en qué conceptos, las referencias que se le van a dar, cómo se va a explicar al resto de compañeros, qué va a pasar con los proyectos en curso, etc.

7. Despedirse con educación

Hay que acompañar al trabajador a su asiento, esperar mientras recoge sus cosas, acompañarle a la salida y darle la mano, deseándole buenos deseos.