Seis de cada diez empresas reducen su gasto en formación
- La formación es un punto estratégico para el 84% de encuestados
Adecco Training, la consultora especializada en formación del grupo Adecco, ha dado a conocer los resultados de su estudio Tendencias en la Formación para el Empleo 2014. Para su elaboración, han contado con la participación de más de 700 empresas provenientes de 15 sectores de actividad diferentes. En las encuestas se ha valorado tanto las inversiones realizadas en el pasado año como las perspectivas existentes para 2014 y los puntos clave a abordar en el sector de la formación para convertirlo en área estratégica empresarial.
El informe llega en un mal momento para las empresas, que en la actualidad se ven en su mayoría inmersas en procesos de reestructuración. A consecuencia de un 2013 complicado en materia económica, la situación de incertidumbre que las compañías viven exige un ajuste de presupuestos que justifica que los resultados obtenidos no sean tan positivos como los de años anteriores. Así, un 60% de las empresas consultadas reconoce haber reducido la inversión en formación con respecto a 2012, cuando los porcentajes se invertían y era esa misma cantidad de compañías las que incrementaban el gasto en actividades formativas.
Pese a esto, otro de los datos importantes que se desprende de este estudio es la gran cantidad de empresarios que considera la formación como punto estratégico, un 84%, según el informe. Las actividades formativas más solicitadas son las relacionadas con las habilidades técnicas, actividad íntimamente ligada a la cuenta de resultados, lo cual confirma la apuesta por la formación como herramienta de productividad y competitividad de las empresas. Sin em- bargo, la previsión es que esta tendencia cambie a favor del desarrollo de las habilidades comerciales, la productividad y la motivación; cambio que demuestra la voluntad de mejorar el bienestar de los trabajadores y de aplicar las nuevas políticas de recursos humanos.
Entorno feliz
Esta tendencia se desprende del dato que revela que el 96% de las compañías consultadas, piensa que crear un entorno feliz entre los trabajadores mejora la productividad y, por tanto, los resultados económicos de la empresa.
De entre los datos obtenidos, sobre el total del presupuesto dirigido a formación, destaca el 24% que se prevé destinar a actividades relacionadas con la Prevención de Riesgos Laborales, el 12% a enseñanza de idiomas, o el 7% a cursos enfocados a promover el liderazgo.
En cuanto a la opinión que los empleados tienen acerca de la formación recibida, nueve de cada diez se muestran satisfechos con ella, aunque con matices: sólo un 7,3% valora las actividades realizadas como muy buenas, frente a un 49,6% que simplemente las califica como satisfactorias. Tan solo un 6,4% de los trabajadores se mostraría descontento con la formación recibida.
Parece que la histórica demanda de los empleados a sus empresas por recibir formación en el ámbito laboral, está posibilitando que las propias compañías se involucren y posibiliten la formación continua de los trabajadores. El objetivo compartido entre ambos, es mejorar los resultados y seguir renovándose, tanto de la empresa como en su propia carrera profesional.