Llegan a Huelva 15.734 temporeras extranjeras para la fresa con casi 40.000 onubenses en paro
- Hay más de 5.000 personas que demandan empleo agrario en la provincia
- La campaña de los berries moviliza a unos 100.000 jornaleros
- Administración, sindicatos y patronales reconocen la "enorme aportación" de los foráneos para paliar la "grave necesidad" de trabajadores
Juan Esteban Poveda
Las primeras 7.084 temporeras del contingente contratado en origen para trabajar en la recogida de los berries ya han llegado a Huelva. Pronto se les sumarán 8.650 más. En total se espera este año a 15.734 trabajadoras extranjeras (son mujeres en su inmensa mayoría) contratadas en origen como fijos discontinuos. Se trata de un refuerzo de mano de obra para una provincia que cuenta actualmente con 39.176 personas inscritas como demandantes de empleo, 5.623 de ellas específicamente en el sector agrario.
En la campaña de los berries en Huelva, que se suele prolongar desde enero a prácticamente el mes de junio, trabajan aproximadamente unas 100.000 personas. Por la experiencia de los últimos años, un 50% es mano de obra española, un 25% comunitarios (de Rumanía fundamentalmente) y un 25% extra comunitarios, entre las que se encuentra el contingente. La paradoja del elevado número de parados en Huelva y Andalucía (700.000 en la comunidad) y la dificultad para cubrir puestos en campañas agrícolas (no sólo la de la fresa), en la hostelería y en otros oficios es un debate abierto y que se enciende cada cierto tiempo.
El recién nombrado consejero de la Cámara de Cuentas, economista reputado y catedrático en la Loyola Manuel Alejandro Cardenete explicaba el pasado mes de diciembre que las políticas de refuerzo del sistema de protección social, el colchón familiar y la economía sumergida están actuando en contra de la dinamización del mercado laboral andaluz, estancado en torno a un 18% de paro desde hace tiempo. Era una reflexión general, pero que se puede aplicar a lo que pasa en Huelva.
En la misma línea, y sin referirse específicamente a la fresa, la consejera de Empleo de la Junta de Andalucía, Rocío Blanco, ha pedido recientemente al Gobierno central flexibilidad, como que sea compatible por un tiempo trabajar con percibir una prestación, y que se controle a quienes rechacen ofertas adecuadas a su perfil. En 2020 la consejera ya se mojó concretamente sobre la campaña de los berries al manifestar que no entendía la situación, pero que "no le podemos poner a cada desempleado andaluz una pistola detrás para que acepte una oferta de empleo", y en todo caso sería "cuestión a lo mejor de modificar la normativa a nivel estatal" para abordar los casos en los que un desempleado que está cobrando una prestación de desempleo rechaza una oferta "justificada y con salario justo".
Oferta de empleo
¿Pueden los parados de Huelva, Andalucía y España acceder a vacantes que ofrecen las empresas freseras? Este año a principios de diciembre el SEPE (Servicio de Empleo Público Estatal) ya había publicado para toda España las ofertas de trabajo en Huelva. Las personas interesadas se pueden inscribir a través de los anuncios publicados por el servicio de Gestión de Empleo Agrario (GEA), herramienta del Servicio Andaluz de Empleo.
Las condiciones laborales son las del convenio colectivo del campo de la provincia de Huelva: jornada de 39 horas semanales (aunque se puede intensificar hasta 10 horas semanales en momentos de necesidad siempre que la jornada diaria no supere las 9 horas), alojamiento a cargo de la empresa para los foráneos y salario entre 51 y 55 euros al día.
Poca respuesta
Tradicionalmente, a estas ofertas responde muy poca mano de obra nacional. Salen con mucha antelación sobre la fecha de inicio efectivo de la campaña (se publican en noviembre, pero la incorporación no se produciría hasta marzo), y los temporeros no planifican con tanto tiempo. Además, al margen de los canales oficiales funcionan otros, como el boca a boca, la recomendación de conocidos y familiares que ya han trabajado años anteriores en una finca, o la búsqueda directa sobre el terreno los días de campaña.
La recogida de fresas, arándanos y frambuesas se solapa a partir de primavera con demandas de mano intensivas del turismo: primero en Semana Santa y luego en el inicio de la campaña de verano. Mucha mano de obra local prefiere la hostelería a la fresa. Las alterna, y si puede elige emplearse en bares y restaurantes.
Necesidad de las empresas
Pero la propia naturaleza del producto hace que las empresas tengan picos en los que necesitan mucha mano de obra: los berries hay que recogerlos en el momento justo para que lleguen a los mercados en condiciones óptimas.
Así que pese al paro en Huelva y provincias limítrofes, la mano de obra local no es suficiente y los contingentes se han revelado como un instrumentos útiles ante esa "grave necesidad" de trabajadores, de forma que patronales y sindicatos coinciden en señalar su "enorme contribución" para la campaña, según han venido a reconocer administraciones, patronales y sindicatos en la última Comisión Provincial de Seguimiento del Convenio para la ordenación, coordinación e integración sociolaboral de los Flujos Migratorios en campañas agrícolas de temporada en la provincia de Huelva, celebrada esta semana.
El grueso del contingente procede de Marruecos, con 14.557, seguido de Colombia (543), Honduras (522) y Ecuador (112). Estos dos últimos contingentes, ya que fueron un proyecto piloto en la última campaña. El movimiento migratorio se produce desde Marruecos, Tegucigalpa, Quito y Bogotá. A través de Marruecos desde Tarifa en ferry, cuatro días a la semana y cuatro veces por día, según datos aportados por la subdelegada del Gobierno en Huelva, María José Rico, y el director general de Migraciones, Carlos Mora Almudí.
En la Comisión están representados organizaciones empresariales y sindicales como Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía, Asaja, Freshuelva, ACPH, UPA, COAG, Fresón de Palos y los sindicatos UGT y CCOO.
No sólo se ha articulado el mecanismo del contingente, sino que también hay otras experiencias de 'reclutamiento' como contratación de jóvenes extutelados, arraigo por formación o autorizaciones por cuenta ajena en oficina de Extranjería, con las que la "grave necesidad de personal ha podido atenuarse, diversificándose el origen y distribución de las jornadas de trabajo declaradas", según términos asumidos por la Subdelegación del Gobierno.
Esfuerzo administrativo
Organizar los contingentes requiere un enorme esfuerzo administrativo que comienza meses antes de la campaña. Una Orden del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones regula la gestión colectiva de contrataciones en origen (Gecco) para 2024, que incluye una previsión anual de las ocupaciones y, en su caso, de las cifras previstas de empleos que se pueden cubrir contratando temporeros en origen.
En los últimos años, además, se ha trabajado coordinadamente desde distintas administraciones y con las empresas en la atención de las personas que acuden a la campaña a través de contingentes: mediadores que las atienden en su idioma, protocolos específicos contra situaciones de abuso e incluso formación en emprendimiento para que esas temporeras puedan crear empresas en sus países de origen.