Editoriales

Comisión financiera que debe vigilarse


    elEconomista.es

    Los inversores suelen ponderar lo que una entidad cobra por la compra y venta de acciones, o dicho de otro modo, por la gestión. De hecho, en el caso de los fondos, dicho coste se sitúa, de media, en un exagerado 1,72%. Pero el ahorrador suele obviar la comisión media que un operador exige por los gastos de custodia, que ascienden al 0,22%.

    Aunque es muy inferior a lo que supone contratar un fondo, estos pagos no son nimios. Máxime si se tiene en cuenta que el coste anual que un bróker llega a cobrar por el mero hecho de mantener (no gestionar) una cartera puede superar los 650 euros. Cantidades así son capaces de devorar toda la rentabilidad obtenida, por lo que el inversor debe tenerlas en cuenta a la hora de decidirse por un gestor.