El Santander convence al mercado
elEconomista.es
La bolsa española vivió ayer su primera sesión posterior al anuncio de que la nueva macroampliación de capital del Santander ya tiene el visto bueno de su consejo de administración. La respuesta del mercado se limitó a un leve retroceso, del 0,77%, de la entidad cántabra. Dicha reacción contrasta con la que se produjo en 2015, cuando el banco también apeló a los inversores para obtener 7.500 millones, una cantidad similar a la que ahora persigue (7.072 millones).
Entonces, la entidad encajó una caída en bolsa superior al 14%, la mayor en 16 años. Sin duda, ambas ampliaciones son muy diferentes. Hace dos años la presidenta Ana Botín se dirigió exclusivamente a inversores institucionales con el objetivo de reforzar de forma contundente la propia entidad. De hecho, su ratio de capital (del 8,95%) cumplía con los requerimientos del BCE, pero quiso elevarla todavía más. En la actualidad, por el contrario, las cifras de Banco Santander no plantean ningún problema a la hora de sacar músculo por sí solas.
Lo volverá a demostrar este mes, cuando se espera anuncie un incremento de su beneficio del 24% en el segundo trimestre de este año. Ahora, lo que el Santander busca es una inyección de recursos que le permita consolidar una compra, la de Banco Popular, que le dará un impulso decisivo para conquistar el liderazgo del mercado español, sin necesidad de comprometer la evolución de sus beneficios. Si a ello se suma el atractivo descuento que la entidad ofrece a los inversores (del 18,6% al cierre de ayer, superior a lo inicialmente esperado), es comprensible que el mercado se muestre convencido de las buenas expectativas de la operación.