Los riesgos de parar las centrales de gas
elEconomista.es
Las eléctricas abandonan los planes para invertir 8.000 millones en la construcción de centrales de ciclo combinado. La decisión de dejar morir estos proyectos es comprensible. Las actuales plantas son deficitarias debido a su escaso funcionamiento ante el auge experimentado por las energías renovables. Por si fuera poco, el anuncio de Energía, poniendo en el mercado otros 3.000 MW de capacidad verde, reducirá a la mínima expresión el gas.
A nivel mundial, la energía vira hacia la generación limpia pero sería un error apagar del todo tecnologías que cubren las intermitencias de las renovables. Basar gran parte de la generación eléctrica en un sola fuente supone un riesgo que un país con la elevada dependencia energética que tiene España, no debería permitirse.