El PIB aún puede conservar su impulso

Las previsiones de primavera del FMI dibujan un panorama incierto con el avance del PIB global acercándose a la frontera del 3%, que marca el inicio de una recesión y recortes en las previsiones de las economías más desarrolladas. España marca la diferencia, pese a tampoco librarse de las rebajas, ya que avanzará un 2,6%, por encima del, hasta ahora, único polo de crecimiento global: EEUU.

Los pronósticos del Fondo demuestran así la fortaleza que todavía atesora el PIB español después de años de fuertes ajustes, sobre todo en el sector privado. Ahora bien, ese impulso no se puede dar por asegurado ante una incertidumbre política, y una parálisis reformista asociada, que, de no atajarse, lo truncarán de forma definitiva.