Editoriales

Grave problema interno de Rajoy

    El presidente del Gobierno Mariano Rajoy.

    elEconomista.es

    El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, proporcionó ayer la mejor prueba posible de la existencia de múltiples irregularidades detrás de la detención del exvicepresidente Rodrigo Rato. Lo hizo durante la reunión que mantuvo en La Moncloa con los empresarios miembros del Foro Puente Aéreo, que agrupa a muchos de los principales ejecutivos españoles. Ante ellos, en un encuentro a puerta cerrada e informal en cuanto a protocolo, Rajoy reconoció que no estaba informado de la investigación a la que estaba sometido el exdirector gerente del FMI.

    Los organismos dependientes tanto de Economía como de Hacienda que conducían las pesquisas actúan de forma autónoma, pero no deja de ser sorprendente que, en una operación que ha tenido un desenlace tan rápido y de tanto calado, hasta el momento mismo de su aparatoso final, la detención de Rato, el jefe del Ejecutivo se mantuviera ajeno.

    En este último caso resulta extremadamente complicado achacar esa ignorancia a cuestiones de procedimiento, máxime cuando éste estuvo caracterizado por una innegable precipitación. En el momento en el que una persona de tanta relevancia como Rato entraba en el coche policial, Rajoy no se encontraba en disposición de dar explicaciones sobre ese hecho. Es más, apenas había personas en el Ejecutivo que pudieran hacerlo, con la excepción del ministro de Hacienda, que ese día comparecía en el Congreso.

    Son indicios que hacen sospechar de la existencia de una trama política premeditada para anticipar un escándalo de calado antes de las elecciones, para cuyo éxito la ignorancia de Rajoy era una pieza más, lo que revela un problema grave en el seno mismo del Gobierno.