Las caídas en Wall Street hablan de agotamiento comprador en el mercado director, lo que cancela la continuidad alcista en las bolsas europeas, que han girado a la baja con virulencia a mitad de sesión por el desplome de los bancos, tras la decisión del BCE de retrasar la subidas de los tipos de interés oficiales.
Las probabilidades de que Wall Street haya tocado techo siguen en aumento, y es algo que se confirmará si al cierre de mañana viernes el S&P 500 pierde los mínimos de la semana anterior, en los 2.775 puntos, algo que no ha sucedido desde que se inició el movimiento alcista en los mínimos de la semana de Navidad.