Las bolsas europeas arrancan la semana con el impulso llegado de China, donde los principales índices han llegado a protagonizar subidas del 5% durante la madrugada de este lunes ante los rumores de una descarga de estímulos por parte de las autoridades del gigante asiático, pero sin poder sacudirse las incertidumbres que tienen enmarañados a los mercados desde hace semanas: la guerra comercial, el posible techo visto en Wall Street, la rebeldía fiscal de Italia, los ambiciosos presupuestos propuestos en España, las tensiones con Arabia Saudí, las elecciones en Brasil...
Y, entre tanto, la banca nacional comenzará a examinarse, con la comparecencia de Liberbank (miércoles), Bankinter (jueves) y Caixabank y Sabadell (viernes), que presentarán sus resultados del tercer trimestre, y el BCE revisará el rumbo de la política monetaria de la eurozona en su reunión mensual.
Razones y más razones para ver un aumento de las tensiones y quizá, incluso, para asistir, de nuevo, a picos de volatilidad, lo que no puede borrar que, actualmente, las pérdidas del Ibex en el año, que se elevan ya hasta casi un 12%, se hayan traducido en un progresivo abaratamiento por PER -numero de veces que el beneficio está recogido en el precio- hasta las 11,2 veces, frente a los múltiplos a los que lo hacía a cierre de 2017 -en las 13,2 veces-, mientras las estimaciones de ganancias apenas se han resentido.
Y, en consecuencia, frente a su media histórica, arroja un descuento del 15%, en línea con el EuroStoxx 50 -12,3 veces- y ligeramente por encima del Dax, que presenta una rebaja del 14% -en las 11,7 veces-, según los datos de FactSet. La menor rebaja la ofrece el Cac -un 3,5%-, en las 13 veces. Al otro lado de Atlántico, las pérdidas de los principales indicadores americanos también han normalizado esta ratio. Mientras que el S&P 500 y el Dow Jones aún cotizan con una prima del 2,8 y el 8%, respectivamente, el Nasdaq 100 lo hace con un descuento del 4% frente a lo que se ha pagado históricamente por ellos.
En este escenario, España se posiciona como el mercado más barato. Un inversor que compre ahora Ibex tardaría 11 años en recuperar su dinero por la vía del beneficio, frente a los 13 años que se han necesitado, de media, en los últimos 18 años.