Meliá presenta sus resultados del primer trimestre este miércoles pero el viernes ya anunció la noticia que el mercado lleva descontando durante los últimos meses: propondrá a la junta general de accionistas un incremento del dividendo del 229%, de los 0,04 euros por acción que repartió el año pasado con cargo al ejercicio de 2015, a los 0,1315 que pagará el próximo 11 de julio. La fecha límite para tener derecho a cobrarlo es el 6 de ese mismo mes.
"Es una noticia positiva que supone un fuerte crecimiento de la remuneración al accionista, incluso por encima de lo previsto", reconoce el equipo de analistas de Banco Sabadell. A los precios a los que cotiza el grupo hotelero actualmente, el dividendo anunciado alcanza una rentabilidad del 1%.
Las acciones de Meliá repuntan en lo que va de 2017 un 23%. Un arranque de año en el que, además de la mejora de la remuneración, han cotizado el buen momento del negocio hotelero en España, el principal mercado de la compañía, donde en 2016 generó el 46% de su cifra de negocio total.
El consenso de mercado espera que el beneficio neto del grupo hotelero de la familia Escarrer ascendiera a 22,4 millones de euros en el primer trimestre, un 0,46% más respecto al mismo periodo del 2016. En la misma línea, el conjunto de analistas que sigue su cotización estima que Meliá incrementó los ingresos en un 4,2%.
La compañía llega a la presentación de resultados presumiendo de la sólida recomendación que recae sobre sus acciones, respaldada por un 76% de consejos positivos del total de expertos que valoran sus títulos.