José Leo, director financiero de Aena, aseguró ayer que sin una participación mayoría del Gobierno español en su accionariado las operaciones futuras serían bastante más sencillas, "aunque este debate no parece estar próximo". Según el ejecutivo, un punto intermedio en ese camino hacia la desinversión sería "encontrar una estrategia con el Estado en la que no debamos preguntar cada vez que queramos realizar una operación". Aún así, "no deberíamos renunciar a otros objetivos estratégicos", dijo señalando al crecimiento internacional como uno de ellos, algo que teniendo al Estado como principal accionista es un objetivo complicado pero no imposible.