Las caídas que hemos visto hoy no me sorprenden tras la pérdida de soportes que vimos ayer y que presentaba el EuroStoxx 50 (SX5E.ST) en los 3.755 puntos, pero sí lo hace su intensidad, que ha llevado a la principal referencia europea a la zona de tangencia con la directriz alcista que surge de unir los mínimos de marzo y de mayo, que discurre por la zona de los 3.600 puntos. Una caída hasta este entorno de soporte era algo que favorecía pero me sorprende que haya sido alcanzado tan rápidamente, algo que a priori es de todo menos un signo de fortaleza.
Desde esta zona de soporte de los 3.600 puntos del EuroStoxx 50 debería formarse un inminente contraataque alcista, esto es, el próximo lunes, y en caso contrario me temo que el riesgo es que asistamos a una vuelta a los mínimos de marzo en la zona de los 3.400 puntos.
En lo que se refiere al Ibex 35, las caídas también se han impuesto con claridad y han llevado al selectivo español a perder soportes que les sugería vigilar en los 8.400-8.470 puntos. Esto hace que aumente el riesgo de que tome cuerpo el escenario de consolidación más amplia hacia los 8.000-8.200 puntos, que de forma insistente he venido insistiendo estas últimas semanas, si bien no era el que más favorecía, y que podía tomar cuerpo mientras el Ibex 35 no superara los 9.000 enteros y el EuroStoxx 50 los 3.850 puntos.