No hay nada como una atractiva rentabilidad por dividendo para atraer a los inversores. No obstante, atractiva no es siempre sinónimo de alta como ponen de manifiesto algunas compañías del Ibex 35.
El caso más llamativo es el Dia cuyo dividendo ofrece un rendimiento este año del 7,8% y del 6,5% el próximo ejercicio. Una cifra que viene motivada por la caída que arrastra la compañía desde enero, más de un 50%. Y es que los problemas que está atravesando la distribuidora hacen pensar si su dividendo es sostenible.
Para Rafael Cavanillas, de Ahorro Corporación, "los pobrísimos resultados del primer semestre del año, unidos a una deuda creciente del grupo y a un escenario actual de pérdida de cuota de mercado en España y una fuerte depreciación de las divisas en Brasil y Argentina, llevarán al grupo a reducir de forma significativa su dividendo futuro frente a lo pagado con cargo a resultados de 2017". Las ventas de Dia dependen en un 20% y 16% de Brasil y Argentina, respectivamente, y mientras que el real ya cede frente al euro un 15% el peso hace lo propio con una caída del 51%.
El payout de Dia superó el 100% el año pasado
A este respecto, con las cuentas del año pasado el grupo pagó a sus accionistas 0,18 euros por acción, un 14% menos que con cargo a 2016. De cara a los resultados del presente año, el consenso de mercado recogido por Bloomberg espera que lo mantenga en 0,18 euros brutos.
"Creemos que la prioridad de Dia sería la expansión del LFL (las ventas comparables, aunque requiera cierto deterioro adicional de los márgenes), para lo que sería necesario un incremento del Capex (inversiones de capital). Y es ahí donde está la clave en relación al dividendo. Este incremento de Capex tendría que ser financiado con deuda o, para evitar incrementos en los niveles de deuda actuales, optar por otras opciones entre las que se podría estar barajando el recorte (o incluso la cancelación) del dividendo y/o desinversiones de activos no estratégicos (como el reciente anuncio de la puesta en venta de la línea Max Descuento)", explica Ana Gómez, de Renta 4.
Con cargo al año pasado Dia gastó 112 millones de euros para retribuir frente a un beneficio de 109 millones, lo que implica que su payout (parte del beneficio dedicada al dividendo) fue del 103%. Para 2018 las previsiones apuntan a una mejora de las ganancias del 38%, hasta los 150 millones de euros. Por tanto, su payout en 2018 sería del 75%.
Para Felipe López-Gálvez, de Self Bank, "lo lógico sería que la empresa revisase su actual política de dividendo. Lo más seguro es que en 2019 lo rebaje para reflejar el empeoramiento de las cuentas y su peor perfil deuda. Acumula varios años de descenso del beneficio y, con un ratio de deuda/ebitda que empieza a preocupar (2,7 veces), la empresa debería destinar mayor parte del beneficio a rebajar su nivel de endeudamiento".
En este contexto, el mercado está pendiente de la presentación del nuevo plan estratégico que, previsiblemente, se conocerá a finales de este año. "Aunque en un primer momento estaba previsto que lo presentaran en octubre, viendo que aún no se ha confirmado la fecha concreta y tras la reciente incorporación de Antonio Coto como Consejero Delegado, el mercado está considerando que se posponga hasta noviembre/diciembre", recuerda Ana Gómez.
El otro dividendo con una rentabilidad deslumbrante es el de Mediaset, el más rentable de todo el Ibex. Si en 2018 el interés de sus pagos es cercano al 9%, en 2019 se mantendrá en los mismos niveles.
En su caso, la caída del 30% que llevan los títulos en el año es la gran responsable de esta cifra tan elevada. Para los expertos su dividendo no es sospechoso, aunque sí advierten de cierta cautela teniendo en cuenta que el negocio de Mediaset está muy unido al ciclo económico. "En función de las estimaciones, el grupo sí generará cash-flow libre suficiente para hacer frente a su dividendo. El problema es que el sector de las televisiones están en pleno proceso de reconversión, por lo que no sería extraño que las actuales estimaciones de resultados, si se desacelera el crecimiento económico y el negocio de la compañía se ve afectado, sean revisadas a la baja, lo que también afectaría a los dividendos que está previsto que paguen", arguye Juan José Fernández-Figares, de Link Securities.
El grupo de medios de comunicación distribuyó con cargo a los resultados del ejercicio pasado 206 millones de euros, a razón de 0,63 euros por acción. De las cuentas de 2018 los analistas prevén un desembolso de 216 millones de euros, ya que subiría la retribución casi un 5%, hasta los 0,66 euros por título.
"No pensamos que la empresa vaya a rebajar el dividendo. Sí es previsible que deje de subirlo progresivamente como ha hecho en los últimos años. El payout se sitúa en el 100% y este año se prevé que el beneficio se mantenga estable respecto al de 2017. El hecho de no tener un problema de deuda le deja manga ancha para poder mantener el actual dividendo", añade Felipe López-Gálvez. A este respecto, si las estimaciones se cumplen, en 2018 su posición de tesorería será de 132 millones de euros. Una cifra que el año que viene sería de 139 millones.
Es posible que Mediaset no siga incrementando su dividendo como ha hecho años atrás
La compañía depende principalmente de los anunciantes en televisión por lo que si la inversión publicitaria cae, sus ganancias, previsiblemente, también. En este sentido, en los últimos meses muchas compañías han tenido que ajustar sus márgenes lo que ha implicado recortar su presupuesto publicitario. Otras lo han derivado a otros soportes como Internet.
Hace unos días los directivos de medios de comunicación que componen el panel Zenith Vigía dieron a conocer sus previsiones y apuntaban a un crecimiento de la inversión publicitaria del 2,2% en 2018, es decir, tres décimas menos que la anterior estimación. Así, esperan que los medios digitales sean los que se lleven la mayor parte del pastel, ya que esperan crecimientos del 11,1% en redes sociales, del 10,5% en móviles, del 9,8% en el vídeo en línea, del 8,9% en Internet y del 5,5% en los canales de televisión de pago. Para las televisiones generalistas los ingresos publicitarios mejorarían un 0,7%.
Por ahora, las firmas de inversión recomiendan mantener los títulos de Mediaset en cartera y le otorgan un precio objetivo de 8,2 euros lo que le deja un potencial alcista del 26% de cara a los próximos meses. "La industria publicitaria está sometida a un fuerte cambio estructural de su modelo de negocio, tanto por la disrupción que representan la publicidad y el consumo de contenidos por Internet como por el rápido cambio en los hábitos de consumo y eso da como resultado fuertes presiones bajistas de precios y estrechamiento de márgenes", concluyen desde Bankinter.