Las últimas caídas han llevado a la cotización de Iberdrola a perder soportes que presentaba en la zona de los 10,50 euros, algo que es una clara señal de debilidad que abre la puerta a una más que probable caída en busca de probar de nuevo la solidez del soporte clave de los 10 euros, que es la clavicular o línea de confirmación de lo que podría ser un amplio patrón de giro bajista en forma de cabeza y hombros (HCH).
En multitud de ocasiones he señalado que Iberdrola es un valor que debe estar en cartera pero si pierde los 10 euros y confirma ese patrón deberíamos de valorar reducir o incluso cerrar posiciones para evitar la posibilidad de que en próximas semanas o meses el título se dirigiera a buscar el objetivo de esa pauta que aparecería en los 8 euros, sin perjuicio de que dudo que profundizara más allá de los 9 euros (base de una potencial bandera que he dibujado en el chart con un canal).