Dejamos atrás una semana en la que las principales bolsas europeas han optado por dar continuidad al rebote que iniciaron a comienzos de este mes de agosto, tras apoyarse de forma general en los mínimos del mes de julio.
Este rebote no ha mostrado todavía la fortaleza mínima que exigimos de cara a que se alejen los riesgos bajistas de que en una próxima caída los índices del Viejo Continente se dirijan a buscar apoyo a los mínimos que marcaron el pasado mes de junio, que en el caso del Eurostoxx 50 se encuentran en los 3.055 puntos, que están a un 8% de distancia de niveles actuales.