La deuda soberana de EEUU a 10 años se ha instalado por encima del 3%, la excusa perfecta para que Wall Street ponga en duda más subidas. ¿Compensa asumir riesgos? La diferencia entre los dividendos en efectivo de las firmas americanas y el rendimiento que ofrece el bono a una década no era tan alta desde 2011, y la brecha con el 'papel' a corto plazo es la mayor desde 2008.
Los bonos soberanos estadounidenses son considerados uno de los activos más líquidos y seguros del mundo. ¿Quién piensa que el Gobierno de la primera potencia económica mundial dejará de pagar su deuda? Por prestar dinero al Estado con la casi total seguridad de que lo devolverá en 10 años, se obtiene ya una rentabilidad superior al 3% anual. Es muy posible que al invertir en la incansable bolsa alcista americana el rendimiento sea mayor –en los últimos cinco años, por ejemplo, el S&P 500 gana un 13,4% anualizado–, pero llegados a este punto, y después de que muchos defiendan que las subidas en Wall Street necesiten un receso a la espera de lo que revelen los resultados empresariales, ha resurgido la eterna cuestión de si la renta variable compensa frente a la rentabilidad que ya ofrece el activo libre de riesgo por excelencia.