El sector del petróleo es el que mejor se comporta este año en la bolsa europea y sube un 9% de media incluyendo firmas de todo del mundo, pero las recomendaciones de los expertos aún son muy atractivas para el sector. El avance del crudo en 2018 ha ayudado, y podría continuar.
En un año que no está siendo fácil para el inversor en renta variable europea, el sector del petróleo es uno de los pocos que está dando alegrías: dentro del Stoxx 600, la del oro negro es la categoría que más sube en 2018 de las siete que están en números verdes en el selectivo. En concreto, el Stoxx 600 Oil & Gas, conformado por una veintena de compañías como la francesa Total, las británcias Shell y BP, y la española Repsol, entre otras, repunta un 9,2% en el ejercicio. Tras ella, el índice de tecnología del selectivo europeo es el que más avanza, con una subida del 4,5%, que no llega a ser ni la mitad que la que ha experimentado el sectorial petrolero del Viejo Continente.
El buen año que está atravesando el sector está relacionado con las subidas en el precio del barril de petróleo, que está protegiendo la rentabilidad de los inversores que ya habían comprado el sector: el Brent sube un 17% en lo que va de año, pasando de los 66,9 dólares en los que arrancó 2018, hasta los 78 dólares actuales. El pasado miércoles, el barril llegó a batir incluso la cota de los 80 dólares, un nivel que sólo se había perforado previamente en una ocasión, en el mes de mayo.
Sin embargo, que el precio del crudo esté a sólo un 2% de los máximos del año, no vistos desde 2014, no impide que los analistas sigan viendo con muy buenos ojos la inversión en las empresas del sector petrolífero: FactSet monitoriza 165 empresas petroleras en todo el mundo con al menos 5 analistas siguiendo a cada firma, y con una capitalización de 1.000 millones de euros como poco, y dentro de este extenso grupo el inversor puede encontrar casi un 60% (98 compañías) de recomendaciones de compra. Un 31% de estas firmas (52 empresas) recibe el consejo de mantener, y sólo un 9% (15 firmas) merece ser una venta, en opinión del consenso de mercado. De esta manera, parece claro que en este momento a los expertos no les asusta que estas 165 empresas representativas del sector estrella este año hayan subido ya casi un 9% de media desde el primer día del ejercicio.
A pesar de que el aceite de roca es una de las materias primas más alcistas del año (sólo el cacao sube más que el oro negro en 2018, con un avance del 20%), hay analistas del mercado del recurso energético que avisan de posibles avances adicionales en los precios. El miércoles de la pasada semana la Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés), avisaba de la posibilidad, cada vez más fuerte, de que el precio del Brent supere definitivamente la barrera de los 80 dólares, un hito que todavía no se ha logrado desde 2014.
La agencia señala principalmente el deterioro de la producción en Venezuela y en Irán como el catalizador que podría impulsar al crudo por encima de 80 dólares. "En Venezuela la producción cayó en agosto hasta los 1,24 millones de barriles diarios [el país producía 2,4 millones de barriles diarios en el año 2016], y si continúa cayendo al ritmo reciente podría producir sólo 1 millón de barriles a final de año", explica la agencia. Sobre Irán, destaca cómo "las evidencias sugieren que sus exportaciones ya han caído significativamente, pero tenemos que esperar para ver si este deterioro de la producción, que ha alcanzado 500.000 barriles diarios, todavía aumenta más". Mientras los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) no cubran el agujero en la oferta que están dejando estas regiones,–el cártel tiene una capacidad excedente de producción de 2,7 millones de barriles diarios, según la IEA, de los cuales cerca del 60% pertenece a Arabia Saudí–, no se puede descartar que "se pongan a prueba los 80 dólares del barril", explica la agencia. No hay que olvidar que el ritmo de crecimiento de la demanda de crudo sigue subiendo: "Tras el avance de 1,4 millones de barriles diarios en 2018, el crecimiento del año que viene será de 1,5 millones diarios", señala la IEA.
Si se quiere tener una exposición diversificada al petróleo a través de compañías cotizadas el inversor puede elegir un fondo que invierta en el sector y que esté disponible en España. Teniendo en cuenta aquellos que cotizan en euros y que tienen por lo menos un 50% de su cartera actual invertida en empresas petroleras Morningstar monitoriza 14 fondos en los que se puede invertir. Sólo uno merece la calificación de 5 estrellas, y es el único de la lista domicilado en España: Ibercaja Petroquímico, con una inversión mínima de 6 euros y una rentabilidad de casi el 7% en 2018, y del 11,4% en los últimos tres ejercicios. Tras él, el fondo irlandés Mediolanum Challenge Energy Equity es el único que cuenta con 4 estrellas Morgningstar. Eso sí, cuenta con una inversión inicial de 5.000 euros, y una comisión máxima de suscripción del 5%, sumada a la de gestión del 2,28% anual. El de Ibercaja cobra una comisión de gestión máxima anual del 1,16%, y ninguna por suscripción.