Situación de corto plazo:
En la jornada del viernes el Ibex 35 (IBEX.MC) volvió a martillear la zona de soporte clave que representan los mínimos del año que marcó en marzo en los 9.327 puntos. Su pérdida confirmaría el deterioro que supuso asistir la semana pasada a la pérdida de la directriz alcista de la figura triangular que acotaba la consolidación del Ibex 35 durante los últimos meses.
La cesión de esta directriz es algo negativo que no encaja en demasía con el contexto potencialmente alcista que buscábamos, pero todavía no cancela nuestra hipótesis de trabajo, algo que si sucedería si el Ibex 35 pierde los 9.327 puntos, que son los mínimos del año. En tal caso todo apuntaría a que el Ibex 35 se dirigiría a buscar apoyo, cuando menos, a los 8.800-9.000 puntos.
Para que se aleje el riesgo bajista a corto plazo el primer paso es que el Ibex 35 consiga cerrar una sesión por encima de los 9.460 puntos y el siguiente paso sería que batiera los 9.600 puntos, que son los máximos de la semana pasada.
Situación tendencial:
Desde la zona de los 11.200 puntos el Ibex 35 está desarrollando una corrección bajista que está sirviendo para ajustar la tendencia alcista previa que nació en los 7.600 puntos. Cuando termine esta corrección todo apunta a que la tendencia alcista principal se retomará hacia objetivos en los 12.000 puntos. No podrá darse por concluida mientras no se superen resistencias de 10.640 puntos. Esta corrección podría buscar la zona de los 8.800-9.000 puntos si caen soportes de 9.327 puntos. Esto supondría un ajuste del 61,80/66% de toda la tendencia alcista que nació en los 7.600 puntos.