Situación de corto plazo:
Después de tres semanas consolidando posiciones las bolsas europeas están formando un rebote que, de momento, lo vemos ilusionante pero no lo suficiente para que se alejen los riesgos de ver una profundización de las caídas que lleve a las plazas más fuertes europeas, como la de Ámsterdam y Frankfurt, a alcanzar los mínimos que marcaron en diciembre. Eso provocaría que el EuroStoxx 50 (SX5E.ST) alcanzara finalmente los 3.375-3.400 puntos, que corresponden a lo que sería un ajuste del 38,20% de todo el último rally alcista y los mínimos de diciembre.
Para que se aleje el riesgo de asistir a esta recaída lo mínimo exigible es que de forma general los índices europeos cierren los huecos bajistas que abrieron en la apertura del pasado 22 de enero, para lo cual el Eurostoxx 50 debería de superar al cierre de una sesión los 3.622 puntos.
Operativamente, el alcance de los 3.375-3.400 puntos sería una oportunidad inmejorable para comprar bolsa europea con una gran ecuación rentabilidad riesgo ya que estimamos que el riesgo máximo de caída se encuentra en la zona de los 3.175-3.200 puntos mientras que el objetivo mínimo de subida se encuentra en los 3.867 puntos (máximos pre Covid crash). Por tanto, comprando en la zona de 3.400 se asumiría un riesgo de un 6% y la potencial recompensa mínima se encontraría a un 14%.
Situación tendencial:
El alcance de la zona de los 2.300 puntos en marzo de 2020 frenó la tendencia bajista y desde ahí el EuroStoxx 50 está formando una reconstrucción alcista que podría llevarlo en próximos meses a recuperar niveles pre-Covid en los 3.867 puntos. Esta subida hacia ahí es el escenario más probable salvo que un eventual recorte provoque la pérdida de los mínimos de octubre en los 2.920 puntos, donde se ha establecido el segundo suelo o peldaño dentro de esa reconstrucción alcista.